Los hay refrescantes y elegantes, tradicionales y disruptivos, sofisticados y contundentes. Eso sí: todos son creación heroica.
¡Y OLÉ!
Un contador indica que van más de 500 mil capitanes servidos. “El día del capitán tiramos la casa por la ventana”, dice Javier Carvallo, gerente general del Bar Olé. Suma pisco con vermouth en copa martinera y acompaña con refill sobre hielo, a sugerencia de Hemingway. Sale con certificado. “El sol y sombra viene de Galicia”, acota el gerente general. “Allá lo toman con cognac, acá con pisco. Como un chilcano, pero con macerado de guinda”, precisa.
TRAGO & TABERNA
“El ‘calentito’ se hace sobre la base de un macerado de hierbas aromáticas”, explica Freddy Sarango. “Zumo de naranja, té filtrante y pisco. Perfecto para el invierno”, sugiere el administrador. Acá en la Antigua Taberna Queirolo, este brebaje se suma a los ya caseritos chilcano y pisco sour. El primero se hace con zumo de limón, hielo, ginger ale, amargo de angostura y tres onzas de pisco. “Para darle más fuerza y cuerpo”. No le echan jarabe de goma. El sour se elabora con fruta fresca, clara de huevo, amargo de angostura y hielo. La fórmula mágica es 3-1-1.
Perú21 ePaper, ingresa aquí y pruébalo gratis.
VIDEO RECOMENDADO: