La esquela viral de una anciana de 103 años con la que se “despide” de ciertos familiares ingratos

Doña Clotilde falleció el pasado 19 de enero cuando tenía 103 años, tiempo en el cual reflexionó sobre las personas que estuvieron a su lado en los malos momentos y los que no.

Redacción PERÚ21

Fecha Actualización

25/01/2022 - 19:18

Las esquelas son documentos que no tienen otra función más que anunciar el sensible fallecimiento de un familiar, donde también se informa el lugar y hora del velorio como del entierro. Sin embargo, en no pocos casos estas tarjetas se han vuelto virales por mensajes, en muchos casos hilarantes, mientras otros son bastante directos, como el que dejó la familia de doña Clotilde, de España, el cual llegó a las redes sociales, donde rápidamente se convirtió en tendencia uno de sus últimos deseos.

La particular esquela fue publicada en el diario Faro de Vigo en la cual, como es habitual, se incluye información básica y necesaria para dar a conocer sobre las exequias que forman parte del último adiós del finado.

La anciana dejó este mundo teniendo unos increíbles 103 años, lo cual le ha dado el tiempo necesario para reflexionar, así como saber reconocer a aquellos que estuvieron a su lado en los buenos y malos momentos, como a quienes no estuvieron cuando se les necesitó.

“Sus hijos Rosa, María del Carmen, Ceferino y María Victoria, hermana, Venancia; nietos, bisnietos y demás familia, ruegan una oración por su alma y la asistencia a la misa rezada que, por su eterno descanso, se oficiará hoy, a las 3 de la tarde, en la capilla de tanatorio de Emorvisa y, acto seguido, a la conducción de sus restos mortales al cementerio de Alcabre, donde recibirá cristiana sepultura, favores por los cuales les anticipan gracias”.

Pero, en la nota al pie al final de la esquela se detalla lo siguiente: “Familia que no se ha preocupado en todos estos años que no se molesten en venir”.

En diversas redes sociales como Facebook y Twitter esta particular esquela se ha vuelto viral, donde miles de usuarios, entre bromas y risas, piensan de la misma manera: es decir, que no tiene sentido que a tu última morada te acompañen personas, por más familia que sean, que no estuvieron en los momentos importantes de sus vidas, más aún cuando hay épocas de necesidad, sea emocional o material.

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