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20 consejos positivos del libro ‘El arte de vivir’ que cambiarán tu semana
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En base a su experiencia y a sus propios tropiezos, Julio Olivera Vega -ingeniero industrial e impulsor de una vida más optimista y con más logros publica su primer libro ‘El arte de vivir’ (Editorial Caja Negra), del cual rescatamos 20 consejos para tomar en cuenta.
1. La gran satisfacción de dar. Dice el autor que se obtiene una inmensa satisfacción cuando una persona da algo a otra. Desde lo material hasta un simple abrazo repleto de amor, pasando por esa sabia palabra que puede cambiarle la vida.
2. En el transcurso del vivir, hay que saber en qué momento detenerse para “tomar aire” y estar totalmente seguro de que el cambio es el correcto. Para el autor, en nuestras vidas debemos buscar espacios en los que tengamos cierto nivel de tranquilidad para evaluar qué estamos haciendo. Al terminar la semana, funciona encontrar un día que nos permita ver qué fue de nuestra semana y qué esperamos de la próxima.
3. “El arte de los pequeños pasos”. Tomada la frase de Antoine de Saint- Exupéry, el autor plantea que hay cosas en la vida a la que debemos aproximarnos de a pocos para que fluyan con éxito.
4. Cuando consigamos un logro, nunca olvidemos “el gran viaje” que emprendemos para conseguirlo. Para alcanzar una meta hay que pasar por una serie de situaciones de aprendizaje que tiene que ver con crecer y evolucionar.
5. Todo tiene su tiempo. Hacerlo todo es imposible o nos generará un impacto negativo, por lo que Olivera sugiere aprender a gestionar el tiempo, es decir, tener agenda personal, donde vayamos apuntando citas y reuniones diarias y semanales, entre otros pendientes. Y recordar que también hay tiempo de descansar.
6. La vida es un camino de obstáculos. El autor dice que ver la vida de esa manera -como una carrera de obstáculos- nos ayuda a evitar lamentarnos cada vez que se presente uno al frente, pues hay que saber gestionarlo de la mejor manera. Cada obstáculo, precisa, traer una oportunidad.
7. El gran juego de la vida no es individual, es grupal. ¡Todos nos necesitamos! Es importante tomar conciencia de que todos nos necesitamos, de una u otra forma. “En todo nivel y en todo tipo de situaciones, como pareja, como familia, como amigos, como compañeros de trabajo, como vecinos, como país, como humanidad... ¡Nos necesitamos!
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8.Empatía, la llave maestra para abrir todas las puertas. “Cuando no podemos leer empáticamente qué tenemos del otro lado de la puerta por cruzar todo se complica”, dice el autor, y remarca que así nuestro proceso de adaptación es mucho más lento o nulo.
9. Todo el proceso del vivir se inicia con el deseo, que se refleja en las ganas de descubrir, crecer, amar y hacer verdad nuestro propósito. El poder visualizar las grandes cosas que queremos lograr, con toda la fuerza que requieren, sin dudar un solo instante e implementando con maestría acciones asociadas al logro... eso es ponerle ganas a la vida.
10. Recurrir a la meditación simple, siguiendo los principios básicos para que resulte, exitosa. En el libro, el autor da una serie de pautas.
11. Cuando no queremos entender algo es porque hay alguna capa de ego que no está dejando “pasar” la sabiduría necesaria para hacerlo. La frase del maestro Javier Wolcoff usada por el autor nos lleva a pensar en la importancia de liberarnos del ego, y ver más allá, manteniendo la mente abierta.
12. Pensar fuera de la caja. ¡Ser creativos! La idea, dice el autor, es rescatar nuestro yo niño, atrevernos a explorar todas las soluciones ingeniosas que se nos vengan a la menta (nuestro mundo de las ideas), arriesgarnos a permitirnos pensar que somos creativos y podemos “inventar” a todo nivel.
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13. El grado de éxito de un proyecto, para hacer verdad una idea, depende de estar seguro, tener arrojo, ponerlo todo y, con coraje, sacar adelante la idea. Julio Olivera Vega sugiere que ha llegado el momento de probarnos de qué estamos hechos cuando la idea llega y queremos que se haga realidad. Y anota: “quien es capaz de hacerlo una vez, lo podrá volver a hacer”.
14. Trabajar en lo que nos gusta. “¿Me gusta lo que hago laboralmente o solo lo hago porque necesito recursos como sustento”. Si la respuesta es “sí, me gusta”, bien felicitaciones. Pero si la respuesta es “no estoy seguro”, el autor invita a replantearse hacer el giro, y con valentía, ir directo hacia el gran cambio. “Lo último que debe suceder en nuestras vidas es llegar a nuestros días finales con muchos ‘habría’ condicionados a anhelos no realizados”, anota.
15. “Fuerte” como un roble, flexible como un bambú”. Al respecto, el autor dice: “Estén listos a recibir golpes porque la vida es así, está repleta de ellos, pero también estén prestos a adaptarse porque el gran juego continúa, y hay que seguir en él”.
16. Niveles de propósito. Si bien para mí puede ser feliz, para otro puede ser realizarse profesionalmente o aprobar un examen. Ante ello, recomienda “vivir plenamente direccionados sabiendo cuál es nuestro puerto de destino, de manera que nuestro barco, por más tormentas que se presenten, consiga mantener la dirección correcta”.
17. Decidir correctamente nos posibilitará alcanzar un grado mayor o menor de felicidad.
18. Agradecer. Cada vez que pedimos algo debemos decir “por favor” y al recibirlo “gracias”. Cuando las personas las escuchan, dice el autor, algo mágico ocurre en ellas y están listas para ayudarnos de la mejor forma posible.
19. Cuando estemos en armonía, todo fluye. “La vida tiene que ver con fluir; en tanto fluye, tiene sentido”, anota el autor y advierte que no debemos dejar de arrastrarnos en las aguas de la mediocridad.
20. Elegir a la pareja. El autor plantea que al elegir a una persona que nos va a acompañar en nuestra ruta debemos considerar que no es fácil, para nada: “Leer a tiempo las señales que recibimos para hacer nuestra elección”.
El libro lo encuentras aquí https://editorialcajanegra.com.pe/tienda/el-arte-de-vivir/
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