PUBLICIDAD
Jose Zelada, director de ‘Ainbo’: “Para generar industria, tienes que vender”
Es uno de los directores de ‘Ainbo: La guerrera del Amazonas’, cinta animada que obtuvo el Premio Platino en España. Perú21 entrevistó al también guionista Jose Zelada.
Imagen
Fecha Actualización
¿En qué pensaba durante la ceremonia de los Premios Platino? “Cómo felicitar al ganador”, me dice y reímos. Desde su asiento en suelo madrileño, divisó la presencia del reconocido director Javier Bardem y de exjugadores del Real Madrid, equipo del que es hincha desde cuando soñaba con ser jugador de fútbol. Reconoció a Marcelo y Morientes. Y estaba ahí, mirando el escenario, con la certeza de que había hecho un buen trabajo más allá de cualquier premiación.
Jose Zelada es uno de los directores de Ainbo: La guerrera del Amazonas, cinta que aquel día de hace casi un mes, en el Palacio Municipal de IFEMA, ganó el reconocimiento a mejor película animada en los Premios Platino. Una coproducción entre Perú, Estados Unidos y los Países Bajos. La historia de una niña de 13 años de la comunidad shipiba que junto a sus guías espirituales busca salvar su hogar ubicado en la profundidad amazónica.
Pero, cuando dieron el nombre de la película, lo hicieron mal. “Ambo: la guerra del Amazonas”, escucharon. En los primeros segundos no sabían cómo reaccionar, no estaban seguros de si se trataba del filme. “Oye, ganamos, somos nosotros”, dijo Jose y quebró el desconcierto, que se transformó en sorpresa y alegría. Los jugadores del Real Madrid y Bardem lo aplaudieron, y él relajó el rostro, dibujó una sonrisa. “Ya me imagino cómo será el Oscar”, imagina desde Estados Unidos.
-Me dice que ya realizan la segunda película, Kayara, en Tenerife, entre otras razones, por un tema de incentivos estatales.
Mientras tengamos una película realizable en España con una coproducción, el gobierno hace un incentivo económico que nos ayuda muchísimo.
-¿En el Perú existe algo así?
No. Perú dista mucho de eso.
-¿Por qué?
Política. Es cuestión de que el Congreso apruebe una ley que dé ese incentivo por ser una cuestión cultural. Si lo promovemos, habría más inversión, producciones de afuera llegarían al Perú.
-Bueno, es la causa de que Ainbo también sea una coproducción con el extranjero.
Sí, con una gran compañía en Hollywood como es CMG (Cinema Management Group), que, entre otros reconocimientos, tiene un Oscar. Ellos distribuyen la película a muchos países de afuera.
-Vayamos al origen de la cinta. Se dice que está inspirada en su madre por su vinculación con el mundo shipibo.
Mi mamá es hija de inmigrantes europeos: irlandeses, portugueses, y en esa época se trabajaba mucho el caucho; mi abuelo tenía negocios en la selva y en uno de sus viajes de negocios, él se metía mucho al monte y dejó a mi abuela en Flor de Punga, un caserío shipibo, en el Bajo Ucayali, por Contamana, y es ahí donde nace mi mamá. Pero no es shipiba.
-¿En qué circunstancias nace?
Como conocían a mi abuelo, las personas que vivían ahí colaboraron con una maloca o cabaña para que mi abuela pueda dar a luz sola y así ocurrió. Ya luego yo me empapé de la selva, me encantaba estar dentro del monte, navegar, intercambiar historias, que se quedaron en mi cabeza para siempre; historias mágicas, creencias, mitos; uno se va empapando de todo ello. Entonces, qué mejor que escribir todas esas historias inspiradas en mi mamá y metiendo el decorado cinematográfico de la magia de Disney. Toda esa mezcla más un drama en el tema de la minería ilegal que depreda los bosques. Salí de la zona como a los 16, 17 años. Pero seguí yendo mucho, casi vivía por allá, yo no quería dejar eso. Pero no solo es la selva; nuestra siguiente película (Kayara) está ambientada en la sierra. Tiene que ver con el Imperio inca dentro del formato comercial, que es muy importante.
-Algunos puristas podrían cuestionar el término “comercial” en este tipo de historias que miran a la tradición.
Para generar industria, tienes que vender. Siempre recomiendo que se trate de hacer el visual o algo del guion un poco más comercial dentro de la estructura que quieras, para que puedas vender. Todas estas películas de Pixar, Disney, DreamWorks se parecen un poco en cuanto al formato porque están dentro de una industria que vende millones. Si a nosotros nos compraron y nos vieron en una feria (fuera del Perú), fue porque nuestro diseño se referenciaba mucho de las grandes productoras. Es importante que las productoras y cineastas peruanos, con proyectos al menos en el tema familiar, tengan en cuenta que es importante que se genere una industria, que haya un retorno para poder seguir haciendo cine. Está bien ganar todos los premios posibles, pero de la mano tiene que haber la intención de un retorno (económico) importante. Y ojo, no digo que lo independiente esté mal.
-Sin embargo, para la visión comercial también aparecen etiquetas como “al estilo Tondero” o “tonderización del cine” como algo negativo.
Creo que Tondero tiene valores en el tema comercial bastante bien concebidos. Ellos hacen un cine que genera industria, trabajo y retorno. Creo que se debe hablar de un cine con retorno para seguir produciendo, pero sin traicionar la historia. Y el gobierno debería dar incentivos que promuevan la industria en el cine en el Perú. En una premiación como los Platino hablar de tu país es muy satisfactorio, porque es un premio para todos los peruanos, que debe motivar a muchos colegas con tanto talento, también para aquellas culturas nativas que sufren por la minería ilegal. Los Premios Platino son la prueba de que sí se puede y de que Dios y la Virgencita hicieron mucho por nosotros.
-¿De dónde viene la fe?
Es una fe que mi mamá nos inculcó a los siete hermanos y los siete estamos metidos en la industria con Tunche Films (que fue parte de la realización de Ainbo: La Guerrera Amazónica) y que ha realizado más de dos mil comerciales. Pero nosotros nacimos para contar historias. Somos una familia que pudo haber caído en problemas económicos y siempre estuvimos unidos y protegidos por Dios, a quien le doy gracias por sobre todas las cosas.
AUTOFICHA:
- “Tengo 53 años, nací en Lima, fui criado en Pucallpa. Acabé el colegio y no pude estudiar. Yo quería jugar fútbol, pero no pude; a los 17, 18 ya tienes que trabajar y era bien difícil entrar a un equipo de fútbol y en esa época no pagaban bien”.
- “Hice muchas cosas al salir del colegio. Entre ellas me dediqué a arreglar persianas de las casas: las limpiaba y pintaba. Y luego trabajé en Chroma Producciones, una de las grandes compañías productoras de comerciales, donde comencé limpiando cables y pisos”.
- “Me encantaba dibujar y contar historias; parece que tenía talento y me fui quedando. Era muy sentimental con lo visual. Se me hizo muy fácil captar el arte sobre la narración y lo visual. Luego formé Tunche Films. Y ya tenemos el guion de nuestra tercera película, que será sobre un mundo de animales en la Amazonía”.
ESTE VIDEO TE PUEDE INTERESAR
TE PUEDE INTERESAR
PUBLICIDAD
ULTIMAS NOTICIAS
Imagen
Imagen
Imagen
PUBLICIDAD