PUBLICIDAD
María de Grecia Cauti: “La ciencia es la mejor inversión que el Perú puede hacer”
Natural de Coracora, Ayacucho, María de Grecia Cauti ganó Beca 18 para estudiar Biología en Lima y hoy, con 22 años, es parte del equipo de la U. Cayetano que desarrolla la esperada vacuna contra el COVID-19.
Imagen
Fecha Actualización
Son las 10 de noche y María de Grecia contesta el teléfono. Acaba de salir del trabajo. En Chincha Alta hace frío y está garuando. Su día empieza a las 6 de la mañana y con 22 años es parte del equipo de la Universidad Peruana Cayetano Heredia (UPCH) que desarrolla, junto al laboratorio Farvet, la esperada vacuna contra el COVID-19; hoy la labor más importante para la ciencia en el mundo.
Curiosidad y vocación de servicio la definen. Coraje y disciplina también. “Un biólogo se pregunta por el origen de las cosas. Depende de nosotros descubrir y explotar nuestras aptitudes”, me dice la estudiante ayacuchana que ganó la Beca 18 del Programa Nacional de Becas y Crédito Educativo (Pronabec) del Ministerio de Educación. La vocación de servicio viene de su padre, quien es profesor de Matemática. Recuerda cuando lo acompañaba a sus clases en las zonas rurales. Veía cómo enseñaba y ella también lo hacía. Así fue voluntaria de la Liga contra el Cáncer, ha enseñado a niños con síndrome de Down y es embajadora en Sisay Mentores para menores con vocación hacia la ciencia.
Recuerda que este 5 de agosto es el día central de la celebración más importante de Coracora, donde nació. Una semana de fiesta por la Virgen de las Nieves. Procesión y quema de castillos. Festejos que este año no se darán por la pandemia. También extraña el cuy al vino, la sopa de mondongo, la tranquilidad del pueblo, el cielo azul y su familia. “Sabemos que llegará un punto para descansar, pero por ahora el trabajo es muy constante”, agrega.
-¿En qué etapa de la vacuna están?
La vacuna ha tenido resultados exitosos en ratones y conejos, en los cuales ha producido una respuesta inmune aceptable y capaz de neutralizar al virus SARS-CoV-2. Estamos evaluando órganos a ver si hay un daño; creemos que no, porque los animales físicamente están bien. Como ya han mencionado los doctores, pronto se viene el ensayo con monos.
-¿Y de ahí viene el ensayo con humanos?
Claro, con un grupo de humanos. Que sería la fase 1, la fase clínica. De ahí se pasa a un grupo mucho mayor, donde nos podríamos acercar más para tener resultados realmente válidos, y que esta vacuna que se está produciendo sea efectiva.
-¿Cómo llegas a ser parte del equipo que busca la vacuna en el Perú? Es un momento histórico.
Estoy muy feliz y agradecida con los doctores por estar en este momento. En el tercer año de estudios tuve la iniciativa de buscar un laboratorio donde realizar mi tesis. La doctora Patricia Sheen, esposa del doctor Mirko Zimic, me recibió en el laboratorio de biología molecular. Y fui parte del proyecto para la producción de un kit de diagnóstico para la tuberculosis. Y a razón de esta pandemia, Farvet y mi laboratorio decidieron hacer realidad la creación de la vacuna. Me dijeron: “María Grecia, ve tú” (ríe). Y yo encantada me vine acá (a Chincha Alta), donde somos cuatro personas, de un equipo de unos 30 trabajando por la vacuna. Me vine a pesar de que todavía estaba en clases en la universidad. En los tiempos libres, me ponía a repasar las clases que eran online. Con mucha presión y tiempos cortos, lo superé y ya terminé la carrera. Y ahora toca preparar la tesis.
-En quinto de secundaria ya tenías claro que querías ser bióloga. ¿Cómo así?
Cuando estaba en tercer año de secundaria, llevé Biología y empecé a entender un poco más sobre ese mundo. Así averigüé que los científicos eran biólogos, y me emocioné.
-Imagino que en casa no tuviste todos los recursos. Y una manera de solucionarlo fue postulando a una beca.
Cuando acabé el colegio dije: “OK, yo no me puedo quedar aquí”. Si bien en Coracora hay instituto y pedagógico, no era lo que yo quería. Cuando acabé el colegio, me dieron una beca por ser primer puesto, lo que me permitía estudiar en Ica o Lima, en universidades nacionales. Pero llegó Beca 18 y esa era la oportunidad.
-Dices que la ciencia ayudará a solucionar los problemas del país.
La ciencia te abre los ojos al mundo, ves en qué situaciones estamos. Conocer y hacer ciencia te hace tener un pensamiento más crítico, una visión más real. Conoces las diferentes enfermedades que hay en el Perú, el origen de ellas y por qué no se encuentra la cura para algunas. La ciencia es la mejor inversión que un país como el Perú puede hacer; y hoy más que nunca nos damos cuenta de eso. Pero nos falta invertir en investigación. Ahora estamos pidiendo financiamiento porque nos vamos a quedar en un punto donde no podremos seguir porque necesitamos dinero para llegar a fases mayores.
-¿Qué pasa con un país que invierte en ciencia?
Tiene vacunas. El Perú nunca ha producido una vacuna para humanos. Un país que realmente hace ciencia tiene diferentes métodos de diagnóstico propios, no espera que otro país haga una prueba de diagnóstico para una enfermedad nativa. Si invirtiéramos más en ciencia, tendríamos mayor disponibilidad de estas pruebas, más conocimiento de las enfermedades que atacan a las zonas más pobres del Perú. Invertir en ciencia es algo muy valioso que estamos aprendiendo en esta pandemia y que espero que el Estado lo tome en consideración. El Perú realmente lo necesita.
-¿Es muy difícil soñar con la idea de lograr una beca y mañana más tarde estudiar en la mejor universidad?
Si alguien se propone algo y tiene la disciplina y coraje de seguir adelante, lo va a lograr. Postular a una beca está al alcance de todos. Hay distintos tipos de becas. La última es una beca exclusivamente para mujeres que quieren inclinarse en ciencias: Beca Mujeres en Ciencias, que se da a fines de agosto. Si tienes ganas, lo logras.
-Pero tú has sido muy estudiosa, María.
Es la fuerza de voluntad. Conozco a chicos a los que no les fue tan bien en el colegio, pero luego la lucharon y lo lograron. Nunca es tarde para enderezarnos en el camino del conocimiento.
AUTOFICHA:
- “Soy María de Grecia Cauti Mendoza. Me pusieron María porque en Coracora veneran a la Virgen de las Nieves; y Grecia porque a mi mamá le encantó ese nombre, que creo que lo vio en un dibujo (ríe). Tengo 22 años y nací en Coracora, Parinacochas, Ayacucho”.
- “Postulé a Beca 18 cuando estaba aún en quinto de secundaria. Terminé el colegio en 2014 y me aceptaron la beca en 2015. Y me fui a Lima para julio de ese año. Mi beca es integral y la recomendación era enfocarse en el estudio; no tuve necesidad de trabajar en otra cosa”.
- “Mi meta después de graduarme es poder hacer una maestría en el extranjero, en enfermedades infecciosas. El Perú necesita mucha ayuda en este tema. Hay muchas enfermedades que no son tan comunes, pero atacan y tienen una mortalidad muy alta en las provincias. Y hacer un doctorado afuera”.
ESTE VIDEO TE PUEDE INTERESAR
TE PUEDE INTERESAR
PUBLICIDAD
ULTIMAS NOTICIAS
Imagen
Imagen
Imagen
PUBLICIDAD