PUBLICIDAD
[Opinión] Patricia Teullet: Hablando con Extraños
Imagen
Fecha Actualización
En su libro Hablando con Extraños, Malcolm Gladwell, analiza una serie de casos que van desde la brillante carrera que una espía cubana tuvo en los EE.UU., con excelentes evaluaciones y reconocimientos por parte de las autoridades americanas, hasta el suicidio de una muchacha que estuvo injustamente encarcelada tres años porque no mostró dolor ante el asesinato de su compañera.
Gladwell atribuye los diferentes sucesos que relata a una serie de errores que se dan cuando pensamos que, por su expresión en el rostro o lenguaje corporal, podemos interpretar si una persona está diciendo la verdad o no. La conclusión a la que llega es que muy pocos especialistas en el mundo aciertan, pero, en la mayoría de casos que analiza, el resultado es casi el mismo que el de una asignación al azar. Más aún, explica que podría haber más justicia si un acusado no tuviera que estar frente a un juez o jurado y estos tuvieran que guiarse únicamente por pruebas objetivas.
¿Hace cuántos años que está recluido Pedro Pablo Kuczynski sin que haya sido sometido a juicio o se hayan presentado pruebas que ameriten esta detención domiciliaria? ¿Cuántos funcionarios probos que tuvieron que tomar decisiones ante la evidencia que existía son perseguidos por hechos posteriores que ellos no podían conocer? ¿Por qué, no solo siendo extraños sino también teniendo certeza de sus delitos (por confesión propia), se da a Barata y a los ejecutivos de Odebrecht el reconocimiento de que dicen la verdad cuando nuestros fiscales les hacen preguntas que son respondidas pero que frecuentemente no corresponden a la documentación analizada?
Y, ahora, si es difícil saber si una persona común miente, ¿cómo será en el caso de políticos acostumbrados a cambiar discursos, prometiendo menos desigualdad y bienestar para todos? Solo queda estar más atentos a las acciones y menos a las palabras.
PUBLICIDAD
ULTIMAS NOTICIAS
Imagen
Imagen
Imagen
PUBLICIDAD