Cuentan con un desfibrilador, un ventilador mecánico, una bomba de infusión, y, de ser necesario, una incubadora portátil. (Ver infografía). Estas ambulancias también deben contar, por normativa, con un especialista (anestesiólogo, emergenciólogo, o intensivista pediatra) capacitado para manejar los equipos médicos.