El pasado martes se reanudó el juicio contra Sergio Tarache, acusado del feminicidio de Katherine Gómez, un caso que ha generado gran consternación en el país. Durante la audiencia, la defensa del acusado, liderada por la abogada Andrea Cortijo, afirmó que no existen pruebas contundentes que demuestren la culpabilidad de su cliente en los hechos que se le imputan.
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En la apertura del juicio, Cortijo desestimó las evidencias presentadas previamente por la Fiscalía, alegando que estas no acreditan la responsabilidad penal de Tarache en el feminicidio agravado de Gómez.
"Se acreditará que no hay prueba donde se aprecia que mi patrocinado roció con gasolina a la víctima y posteriormente puso en peligro su vida, pues, al ser analizadas, no se podrá determinar con certeza que el señor Sergio Tarache Parra haya cometido el delito atribuido", sostuvo la abogada durante su intervención.
La letrada también adelantó su opinión sobre las pruebas con las que la Fiscalía acusa a Tarache Parra por los hechos ocurrido en marzo del 2023. “¿Qué nos va a traer el Ministerio Público?, pues testigos que no estuvieron en el lugar, videos extraídos de YouTube, entre otras pruebas que no van a acreditar que mi patrocinado puso en peligro la vida de la víctima”.
Por su parte, el Ministerio Público reafirmó su solicitud de una condena de 30 años y seis meses de prisión para Sergio Tarache, junto con una reparación civil, argumentando la gravedad del delito contra la vida, el cuerpo y la salud, categorizado como feminicidio agravado.
PIDEN CADENA PERPETUA
Cinthia Machare, madre de Katherine Gómez, expresó sentirse “decepcionada” por el pedido de 30 años de cárcel para Sergio Tarache, ya que asegura que solo estará tranquila cuando el feminicida confeso reciba cadena perpetua.
“Si no le corresponde la cadena perpetua... La verdad es que estoy decepcionada porque, en su momento, ellos me prometieron algo a mí y yo, como ciudadana y como madre, esperé que cumplieran”, refirió, según informa TVPerú.
A través de sus redes sociales, el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (Mimp) también consideró que este tipo de violencia extrema debe ser juzgado con la máxima pena, es decir, la cadena perpetua.
“Pedimos que se analicen todos los medios probatorios y que se evalúen las circunstancias agravantes del caso. El feminicidio es un delito que debe ser castigado con la máxima sanción, ya que representa la forma más extrema de violencia contra las mujeres”, se lee en su comunicado.
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