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Matanza de San Miguel: descubren el búnker de los ‘gatilleros’ que asesinaron a ‘La Tota’
Poco a poco los implicados de la matanza de San Miguel han sido capturados, pero quedan dos nombres importantes por detener: David Durán Larrea, alias ‘Loco Franco’, y Kevin Espejo, alias ‘Willy’.
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Se van atando los cabos de la matanza de San Miguel. Hasta el momento la Policía Nacional del Perú ha capturado a ocho sicarios (seis de ellos vinculados directamente con el crimen), tiene identificado al autor intelectual y a su lugarteniente, y también posee el registro completo de todos sus movimientos.
En el programa Sin Medias Tintas, la PNP identificó que los sicarios contratados por David Durán Larrea, alias ‘Loco Franco’, se reunieron en un departamento ubicado en el conjunto habitacional Palomino, estratégicamente a 4 cuadras de la casa de Israel San Román Doroteo, alias ‘La Tota’, quien era el objetivo de los asesinos.
El coronel PNP Víctor Revoredo, jefe de División de Estafas - Dirincri, dijo que a ‘La Tota’ le hicieron un reglaje penetrando en su entorno familiar donde obtuvieron información privilegiada de sus desplazamientos para esperar el momento oportuno para atacar.
El día del ataque, las acciones de los sicarios comenzaron poco antes de las 11 de la mañana con el ‘Loco Franco’ rondando cerca de la casa de ‘La Tota’. A las 10:44 de la mañana uno de sus informantes le dijo que su ‘enemigo’ iría a la playa a bordo de un auto blanco y acompañado de su familia. Luego de saber esto, dio la orden a los sicarios para que ataquen.
Inmediatamente después los ‘gatilleros’ salieron del bunker de Palomino: José Solari, alias ‘Charly’; Kevin Espejo, ‘Willy’; José Preciado, ‘Josecito’; Fabricio Vega, ‘Bicho’; subieron al ya conocido auto negro.
Pero no fueron los únicos, también salió otro auto del mismo color conducido por Miguel Estrada Tufino, y dos motos por si alguno de los sicarios necesitaba de otro medio de transporte para huir.
Las cámaras de seguridad en la avenida Riva Agüero muestran el seguimiento que le hacen a ‘La Tota’ los gatilleros, Estrada y el ‘Loco Franco’. Sin embargo, no contaron que en el camino se cruzarían con un patrullero.
Luego de varios intentos de homicidio a los que sobrevivió, ‘La Tota’ poseía cierta paranoia, sobre todo si se sentía perseguido. Cuando visualiza el patrullero, le hace un gesto señalando a los gatilleros y estos avanzan y desaparecen de escena. Entonces el patrullero acompaña unos metros a ‘La Tota’ y a su familia, pero luego toma otro rumbo.
Cuando ven que está otra vez desprotegido, los sicarios retoman sus puestos y ya cerca de Plaza de San Miguel atacan y asesinan a los seis miembros de la familia. Luego todos regresan al búnker de Palomino a dejar sus armas.
Poco a poco los implicados en este crimen han sido capturados, pero quedan dos nombres importantes por detener: David Durán Larrea, alias ‘Loco Franco’, quien es el autor intelectual; y Kevin Espejo, ‘Willy’, su lugarteniente y el asesino de los hijos de ‘La Tota’.
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