Donald Trump afirmó este jueves que Estados Unidos es "un cubo de basura" debido a la política migratoria de su rival Kamala Harris, quien contó con la ayuda del expresidente Barack Obama y del roquero Bruce Springsteen para intentar desempatar las encuestas.
El 5 de noviembre, día de las elecciones presidenciales estadounidenses, está a la vuelta de la esquina y la temperatura electoral va en aumento.
El expresidente republicano ha endurecido, si cabe, su retórica antimigrante durante un mitin en Arizona, uno de los siete estados que pueden decidir el resultado de los comicios.
"Kamala Harris ha orquestado la traición más atroz (...) ha erradicado nuestra frontera soberana, y ha desatado un ejército de bandas de migrantes que están librando una campaña de violencia y terror contra nuestros ciudadanos", acusó Trump.
"Ninguna persona que sea responsable de tanto derramamiento de sangre y muerte en nuestro territorio puede ser autorizada a convertirse en presidenta de Estados Unidos", soltó, sin ninguna prueba que lo respalde.
Los migrantes "vienen de 181 países (...) somos un vertedero. Somos como un cubo de basura para el mundo", afirmó a la muchedumbre. "Es la primera vez que digo cubo de basura pero ¿saben qué? Es una descripción muy acertada".
Se supone que Trump iba a hablar de la vivienda, pero ni lo mencionó.
Enumeró por el contrario las principales medidas de lo que será su política migratoria si gana los comicios.
El magnate resucitará el programa Quédate en México, introducido por él para que los migrantes esperen el desenlace del proceso migratorio del otro lado de la frontera, y prohibirá las ciudades santuario, que protegen a los migrantes de la expulsión.
Promete contratar 10.000 agentes fronterizos, subir el sueldo a los existentes y suprimir "todos los beneficios federales y de asistencia social para los migrantes ilegales" porque así, según él, "ya no vendrán".
El republicano de 78 años, que en el pasado dijo que los migrantes "envenenan la sangre del país", insiste en que, si gana, llevará a cabo una deportación masiva e invocará una ley de 1798 para acelerar las expulsiones de los miembros de las pandillas Tren de Aragua y MS-13.
"El turno" de Trump
Su rival, la vicepresidenta demócrata, se dio un baño de multitudes en el estado de Georgia (sur) compartiendo escenario por primera vez con Obama, quien lleva días sudando la camiseta en solitario para que ella se convierta en la primera mujer al frente del país.
Obama, famoso por su lema "sí se puede", desplegó todo su carisma para tender la mano a su "amiga", a quien dio un abrazo.
Estados Unidos "está preparado para pasar página" con Harris, dijo, y advirtió de lo que pasará, según él, si gana Trump.
Citó al exgeneral John Kelly, exjefe de gabinete del republicano, según el cual Trump alabó a los generales de Adolf Hitler.
"En política, una buena regla general es no decir que quieres hacer nada parecido a lo que hizo Hitler", comentó Obama, diciendo que era "un consejo".
"Él piensa que el ejército existe para hacer su voluntad" y quiere perseguir a sus enemigos, es decir "cualquiera que lo critique o se niegue a arrodillarse", acusó.
Si Trump gana "no tendrá a personas como John Kelly para detenerlo. Estará rodeado de personas tan locas como él, y que le dejarán hacer lo que quiera", advirtió.
Harris piensa impedirlo.
Como fiscal "me enfrenté a delincuentes de todo tipo, depredadores, estafadores y reincidentes, me enfrenté a ellos y gané", dijo. En "12 días es el turno de Donald Trump".
"Un tirano"
La vicepresidenta demócrata lo apuesta todo a una carta. Lo que está en juego en las elecciones, según ella, es la defensa de la democracia frente a un hombre interesado en un "poder sin control".
La candidata demócrata de 60 años afirma que Trump "trama venganza y represalias" contra sus enemigos políticos.
Lo mismo opina Springsteen, cuyos himnos a la lucha de la clase trabajadora lo han convertido en uno de los artistas más populares del país.
Ella "se presenta para ser la 47ª presidenta de Estados Unidos. Donald Trump se presenta para ser un tirano estadounidense", dijo "El Jefe", que interpretó tres canciones.
"Él no entiende este país, su historia o lo que significa ser profundamente estadounidense, y por eso, el 5 de noviembre, voy a votar por Kamala Harris y Tim Waltz", su compañero de fórmula, añadió.
El mitin terminó con el lema de la demócrata.
"¿Creemos en la libertad? ¿Creemos en las oportunidades? ¿Creemos en la promesa de Estados Unidis y estamos dispuestos a luchar por ella?", preguntó Harris. "Cuando luchamos, ganamos".
CON INFORMACIÓN DE AFP
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