La azarosa y feliz curiosidad de Alfonso Santistevan lo llevó a descubrir, en un volumen de historia colonial, el insólito destino de fray Calixto de San José Túpac Inca. El registro de su epopeya individual es Una hazaña nacional, que ahora está en escena, en el Teatro Ricardo Blume. Mestizo en el siglo XVIII, Calixto era un donado (sirviente) franciscano y estaba impedido de ser fraile. Su miseria y la de los indios lo llevó a redactar un informe reformista dirigido al rey y conocido como la Exclamación. Ante la indiferencia de Lima, el donado parte sin autorización y en Cusco halla la misma frialdad en la nobleza incaica. Entonces Calixto se lanza a la empresa de llevar él mismo el documento y entregárselo al monarca. Sin dinero ni autorización, empieza una odisea, junto con fray Isidoro de Cala, que culminará dos años después, en Madrid…