Al gobierno actual de Dina Boluarte les falta todo, inclusive tino para darse cuenta de que participar en CADE Ejecutivos es importante a pesar de los cuestionamientos que pueda tener actualmente que, por cierto, se los ha ganado a pulso. Esa falta de reflejos es la muestra objetiva de la decadencia de un gobierno que está más cerca de concluir que de llegar hasta 2026.
Al parecer le molestó el resultado de la última encuesta de Ipsos que evaluó la percepción que tiene el sector empresarial; el resultado catastrófico de desaprobación que arrojó esta ha llevado a la presidenta y a sus ministros a no asistir, ni siquiera a la clausura del evento empresarial más importante del país, que siempre tenía como personalidad invitada para la gala de cierre al presidente de la República.
Se clausuró el evento con la ausencia notoria de la mandataria y el evidente malestar del sector empresarial que concurrió a CADE 2024 en Arequipa, y la suspicacia es que la presidenta se molestó por el resultado de la encuesta y prefirió hacer la pataleta prohibiendo a sus ministros a participar de tan magno evento empresarial.
No puede actuar la presidenta Boluarte de manera emocional y menos expresar su disconformidad no asistiendo a CADE, deja un terrible precedente que muestra un comportamiento infantil; era previsible que el resultado de las encuestas iba a ratificar el nivel de desaprobación que tiene el actual gobierno, lo que pone en riesgo la gobernabilidad.
CADE tuvo la presencia del presidente del BCR, Julio Velarde, que tuvo una conferencia magistral explicando la fortaleza del manejo de la economía monetaria del país sobre la base de la responsabilidad en el manejo del gasto y la optimización de los recursos escasos. Además, reclamó la responsabilidad que debe asumir el ministro de Economía ahora que se proyecta un déficit fiscal de más de 4%, indicador nunca visto desde el gobierno de Fujimori, por lo que exhortó a Hacienda a controlarse en el gasto público.
Nos quedamos con las frases que se reiteraron en CADE y en las que Velarde puso énfasis, como que la inestabilidad política frena el crecimiento del país, siendo la principal causa para la desaceleración del PBI, teniendo un escenario óptimo que permitiría un crecimiento sostenido con el superciclo de precios altos de los minerales y las posibles inversiones que se podrían emprender si hubiese algo de estabilidad política.