Ya creo que estos fueron

“Quien a hierro mata, a hierro muere”, reza el adagio. Vizcarra fue uno de los protagonistas del ‘Moqueguazo’ contra García (y Southern) en 2008 y hace poco le lanzó un ultimátum de plazo al Congreso. Hoy ese mismo Vizcarra enfrenta una inquietante convulsión en Arequipa (contra esa misma Southern) y ha tenido que aguantar que esa cosa que es el actual gobernador regional de Arequipa le mande un ultimátum de plazo. Gozaría y le diría “ahora chúpate eso, Vizcarra” si no fuera porque todo lo anterior daña al país.

- Tras esta bomba nuclear del Gasoducto del Sur, esos coleguitas y medios que actuaron como esas focas que solo saben aplaudir y no como profesionales ya no podrán caricaturizar a los muy pocos que cuestionábamos ese desafortunado acuerdo fiscal con Odebrecht como “protectores de corruptos” o “aprofujimoristas”.

Críticos de la ribera izquierda se han sumado (Lauer, Azabache, Uceda, H-13), amén de editorialistas centristas (leer el editorial de Gestión de ayer o al editor Cohello de Correo). Es que a estas alturas hay que ser MUY fanático para no reconocer que ese acuerdo fiscal fue un regalo para Odebrecht, que la sacaba así MUY barata. No creo en esas absurdas teorías conspiratorias que afirman que los fiscales jugaron en pared con Odebrecht. Creo, más bien, que sus ansias de cazar a García y Keiko como sea, el endiosamiento mediático al que fueron expuestos por las focas sobonas y los caviares, los aplausos de los muchos desinformados indignados y el mangoneo de una poderosa ONG les hicieron perder la sindéresis. Debieron sacar un acuerdo MIL veces mejor; cartas tenían. Hoy ya andan muy devaluados: creo que ya están en descuentos y pronto serán abandonados por focas y caviares. Sic gloria transit mundi: la gloria se desvanece rápido en este mundo, muchachos.