Entre toda la biodiversidad del rico mar peruano, un molusco colosal, híbrido de pota con concha, con el tamaño de la primera y la desvergüenza de la segunda, ha aparecido no sólo en nuestras costas, sino también en nuestros lagos, y dicen que hasta en los ríos de costa, sierra y selva. Por puro azar, la aparición de este molusco coincide con ciertos hechos de la política peruana reciente que podría valer la pena enumerar.
El ministro del Interior ya desactivó la DIVIAC, y va a lograr que se pase al retiro al coronel Harvey Colchado, entre otros 700 a 800 oficiales de la PNP, nada menos. Un día dice que ya sabe dónde está Cerrón y luego que él no está a cargo de atraparlo, mientras en el local del Congreso se le rinden honores al fugitivo menos buscado del país. En adición a ello, la ley propuesta por su hermano Waldemar se invoca ante el Poder Judicial en favor de Vladimir. La gestión del ministro, que se sabe ha defendido a policías cuestionados y a nada menos que narcotraficantes, uno de ellos en pleno pedido de extradición por Argentina, no genera incomodidad suficiente en el Congreso para una censura. Todo sugiere que el pacto es a Cerrón no se le encierra y a Colchado y la DIVIAC te los tumbas. El descaro es tal que, si se materializa, tal vez les rebote en la cara, convirtiendo a Colchado y su equipo en activos políticos que se pelearán algunos de los partidos (entre 35 y 60) que buscan participar en las elecciones. Cuando llegue abril 2026 (o antes), el acumulado de hartazgo va a necesitar personas que lo representen y el combazo puede terminar convirtiéndose en un deseo popular.
En el Congreso también se cuece todo tipo de habas. APP nuevamente elige a uno de sus cuadros cuestionados para ejercer la presidencia del Congreso. ¿Por qué se escoge dos veces a personas cuestionadas? En política la ingenuidad es el peor pecado, dicen, lo que sugeriría que es para poder tener con qué controlar cuando se necesite. Algo similar a lo que ocurre con el MINSA, donde no sólo escasean las medicinas, sino que ahora se busca concretar el cambio de examen para el SERUM, que, por pura coincidencia, parece que no aprobaban los alumnos de universidades vinculadas. Felicitaciones a la facultad de medicina de la UNSM y a la Cayetano Heredia por negarse a que les den poncha no apta para el consumo humano. La demeritocracia que impulsa el Congreso en distintos frentes requiere que se le ponga el pare.
Como si no fueran suficientes los sapos a deglutir, la repartija incluye entre los presidentes de comisiones al congresista Guillermo Bermejo, con acusaciones varias y muy graves, y con probada cercanía con los cocaleros, que forman parte de la cadena del narcotráfico. Y la comisión de Ética pasaría a ser presidida por un representante del Bloque Magisterial, lo que ha merecido editorial de El Comercio ayer. Las opciones posibles incluyen niños, padres que negaron alimentos, mochasueldos y sus defensores, venta de exámenes, coimas a alcaldes, acusaciones por doble homicidio, y otras minucias sobre las cuales, claro, dicen que debe prevalecer la presunción de inocencia, cuando ésta es una garantía para no meter preso a un inocente, y no la vara con la que se debe medir a autoridades.
Por su lado, Podemos Perú se inicia con la presidencia de la Comisión de Salud, justo, justito cuando acaba de convertir su local de la universidad de fachada en el Centro Médico Internacional Galeno de Pérgamo. Pérgamo, me desasnó Copilot, es una ciudad antigua griega, con una gran biblioteca y famosa por la producción de pergaminos. La elección del nombre no puede ser casual. A falta de pergaminos reales, Pérgamo en la razón social y listo.
Una frase brutalmente cierta de Martín Hidalgo lo resume: hoy más negocio es ser bancada que gobierno. La reproducción tan veloz de la poncha puede destruir el ecosistema. Son tan grandes y se aparean tanto que luego arrasan con todo.