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El mejor, lejos
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A la final le sobró el segundo tiempo del partido de ayer. La contundencia de Cristal liquidó a Alianza. Bengoechea metió tres cambios, pero no había manera. Solo quedaba esperar que Herrera anote y hasta eso se dio. Ganó dos de los tres torneos, fue el que más goles hizo, el que menos recibió. De lejos el mejor y lo ratificó en la final con autoridad.
Hay tres nombres para destacar. Dos futbolistas y el entrenador. Costa y Herrera tuvieron un año y números impresionantes. Entre los dos marcaron 65 goles y siempre se entendieron. Los 40 goles de Herrera son un nuevo récord para el fútbol peruano. Un goleador que encontró en esta temporada su mejor nivel. Costa fue el mejor jugador de las dos finales con dos goles y tres asistencias. Absolutamente decisivo. Terminó el 2018 imparable.
Abierto por la derecha o acompañando al punta, siempre optó por lo que pedía la jugada. Además, mejoró los centros en las pelotas paradas –de hecho, así vinieron los goles de Revoredo y Cazulo–. El tercer hombre es Mario Salas. Desde el día uno dejó claro cómo quería jugar. Intentó ser protagonista siempre sacando la pelota desde atrás. Con dinámica y variantes para atacar. Terminó armando un equipo, que es el más dominante de la década. Contundente, y respetando el estilo.
La mala noticia es que estas campañas en el fútbol peruano no pasan desapercibidas en el mundo y es casi imposible que Salas y Herrera se queden en Cristal. Lo primero es reconocer la enorme calidad de ambos. Luego reemplazarlos de la mejor manera para finalmente lograr que Cristal pueda volver a ser protagonista en la Copa Libertadores. Son 19 títulos. Cuatro en los últimos siete años. El mejor, lejos.
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