[Opinión] Camila Bozzo: Ya es hora de regresar a clases

El Banco Mundial, en un informe publicado en marzo, graficó los dramáticos costos que el cierre de escuelas generará en los países latinoamericanos (es la región con los cierres más largos). Costos enormes en el aprendizaje y en el desarrollo emocional y mental de los niños, sí, pero también costos para toda la sociedad por la pérdida de capital humano y productividad. 

Según sus proyecciones, considerando un cierre de escuelas de apenas 10 meses, dos de cada tres estudiantes no serán capaces de leer o comprender textos adecuados para su edad por la ausencia de educación presencial. Si las escuelas permanecen cerradas este año la tragedia será aún mayor.

Además, se ensanchará la ya existente brecha socioeconómica de rendimiento académico. Los niños de menores recursos, que no tienen buena conectividad en casa y un espacio adecuado para estudiar, quedarán rezagados y difícilmente podrán ponerse al día. Se estima que un niño de bajos recursos que no va un año a la escuela puede rezagarse tres años.

En estas circunstancias el retorno a clases se convierte en un imperativo ineludible. Ya hay evidencia que demuestra que las probabilidades de contagio de los niños es baja y, además, muy pocos mueren por COVID (1 por cada 500 mil contagiados, según un estudio realizado en Norteamérica en abril y publicado en The Economist).

En el Perú ya se inició el retorno progresivo en zonas rurales. Sin embargo, es insuficiente, no podemos esperar hasta el próximo año para que las clases se retomen en las zonas urbanas. Urge que se inicie el retorno semipresencial, voluntario, flexible, y con protocolos y condiciones de seguridad adecuadas. Más aún cuando hay otras actividades, como centros comerciales y  restaurantes, que ya están operando. Es necesario que le exijamos al próximo gobierno que priorice la educación.