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[Opinión] Gabriel Ortiz de Zevallos: Evito Morales
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¿Evito, el diminutivo de Evo o la conjugación de evitar? Pues ambos. Es que Evito (grande no es) evita la moral en plural, no atraca ni con el ama llulla. Mintió descaradamente en 2008, cuando en las últimas negociaciones de su constituyente (que había generado enfrentamientos con muertos) se comprometió con las demás fuerzas políticas a una sola reelección y que su primer mandato (2006-2010) contaba para ese cálculo, lo que se escribió en artículo específico. Se zurró en lo escrito y firmado para gobernar hasta 2019 y buscar un período más en elecciones que la OEA calificó como fraude. Miente sin ningún problema.
Machista ofensivo hasta la náusea. A sus ministras: “no quiero pensar que es lesbiana” a Ariana Campero, por ser soltera; “llora pues (…) te daré de yapa un polvito más”, a Nary Suxo; a todas sus ministras en general: “Este presidente, de gran corazón, a todas sus ministras les quita el calzón”. A las trabajadoras de YPFB “¿perforadoras o perforadas? Otras más: “Cuando estuve en Cochabamba las compañeras me decían: mujeres ardientes, Evo presidente; mujeres calientes, Evo valiente; mujeres aguantan, Evo no cansa”. “Cuando voy a los pueblos, quedan todas las mujeres embarazadas y en sus barrigas dice: Evo cumple”. Como coartada dice que es un feminista que hace bromas machistas. Pero algunas no han quedado en bromas: “Yo dije alguna vez que acabo mis años de gestión con mi cato de coca, mi quinceañera y mi charango”, y las acusaciones de tener relaciones con menores de edad han sido materia de denuncias recurrentes. Jon Lee Anderson, del New Yorker, confirma que sí había una relación cuando lo entrevistó en México. Además, Morales tiene hijos que no reconoció sino muchos años después, tras denuncias de sus respectivas madres. Más machista y patriarcal que Evo, muy difícil. Bellido y Belmont son chancay de a octavo.
Se encuentra mucho más. Priorizo lo vinculado a la coca, por el riesgo implícito para Perú. Valentín Mejillones es el sacerdote aimara que protagonizó las ceremonias de asunción de mando de Evo en 2006 y 2010: 350 kilitos de cocaína en su casa. Dicen que Evo no lo eligió para la ceremonia. Dos años antes, Evo había expulsado a la DEA. Al año siguiente, fue detenido René Sanabria, exsar antidrogas de Bolivia, y condenado a 14 años de prisión. Evo sospecha de una campaña imperialista en su contra. En 2013 expulsó a USAID, como pide el congresista Bermejo y ofreció el presidente Castillo durante la campaña. En Bolivia como en Perú se insiste con la industrialización de la coca, para la cual Devida e INEI probaron que no hay demanda en julio pasado. Eso es arriesgar a los jóvenes del Vraem a ser pasteleros y narcos.
Evo Morales fue invitado especial del foro organizado por la Fenatep por el lanzamiento del Partido Político Magisterial y Popular (PPMP) y del congreso de jóvenes de Perú Libre en plan de gran consejero. Salvo cómo perpetuarse en el poder no tiene mucho qué enseñar, Perú ha logrado más en economía e indicadores sociales en el lapso que él gobernó Bolivia. El ego de Evo sí daría para musical propio: Evito.
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