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[OPINIÓN] Richard Arce: “¡Son unos hijos de su madre!”
Los congresistas irresponsablemente incrementaron el presupuesto hasta más de 240 mil millones de soles, de los cuales el Congreso tiene un incremento de más de 200 millones, teniendo más de mil millones para el despilfarro.
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Si solo vemos el festín que están haciendo los congresistas con el dinero público, es ya un escándalo por el abuso de la discrecionalidad que tienen para disponer de estos fondos y otorgarse hasta un bono de casi diez mil soles, sin ninguna razón que justifique, en medio de una crisis económica que vive el país.
Fui congresista y por supuesto que conozco de las remuneraciones y los beneficios especiales que reciben los legisladores, toda una élite dentro de la gestión pública, pero este Congreso ya ha perdido cualquier atisbo de vergüenza y ahora con total desparpajo se otorgan beneficios económicos, que son irracionales en medio de la austeridad que se exige a las autoridades con los presupuestos.
Este mes de diciembre, los congresistas van a recibir casi sesenta mil soles, por diferentes conceptos, que incluye el sueldo, los gastos de representación, el aguinaldo y jugoso bono de casi diez mil soles; multipliquen por los 130 parlamentarios, el costo que va a significar al erario nacional es obsceno, porque nuestra economía ha entrado en recesión y es evidente que la capacidad de recaudación fiscal se va a reducir; entonces, cómo piensan cubrir este presupuesto, sino se va a poder sustentar el presupuesto general de la República requerido.
Los congresistas irresponsablemente incrementaron el presupuesto hasta más de 240 mil millones de soles, de los cuales el Congreso tiene un incremento de más de 200 millones, teniendo más de mil millones para el despilfarro. Todo esto se hace en desmedro de sectores determinantes como seguridad interna, a quienes se les ha reducido su presupuesto, sabiendo de sus necesidades y el incremento de la criminalidad que expone a la población a un ambiente de inseguridad, como problema principal del país.
El desprecio que muestran por el bien público los congresistas con estas actitudes es de escándalo y se acrecienta porque ni siquiera trabajan, siguen en virtualidad, con las evidentes limitaciones de la labor parlamentaria que requiere del debate y la argumentación en presencial.
Pero eso no es nada, en realidad, estarían gobernando para las mafias y los delincuentes, por lo que hoy van a arremeter de nuevo contra la JNJ, una semana después no están tranquilos y ahora pretenden sin ningún sustento jurídico ni argumentos válidos dar un golpe a la democracia, imponiendo la fuerza de sus votos para ajustar cuentas con la JNJ, porque se atrevió a suspender a la fiscal de la Nación, con quien traficaban votos.
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