Partidocracia rediviva

“De aprobarse este nuevo despropósito parlamentario, significaría un poder ilimitado para las cúpulas partidarias que así podrían designar a dedo a sus representantes en elecciones generales o locales”.

Editorial Perú21

Fecha Actualización

11/11/2023 - 07:10

Congresistas de distintas bancadas han presentado un proyecto de ley nefasto para el fortalecimiento de la democracia, tan debilitada en estos últimos años. De aprobarse este nuevo despropósito parlamentario, significaría un poder ilimitado para las cúpulas partidarias que así podrían designar a dedo a sus representantes en elecciones generales o locales.

El debate de la iniciativa, que estuvo a punto de convertirse en dictamen el último martes, fue pospuesto para dar oportunidad a que los organismos electorales y los partidos políticos con inscripción vigente expongan sus puntos de vista ante dicho grupo de trabajo.

No obstante, el JNE y la ONPE ya han adelantado su oposición, pues lo consideran inviable. “El proyecto de ley no permitiría seguir avanzando con el proceso de democratización partidaria”, ha indicado el Jurado Nacional de Elecciones.

La propuesta modificaría la Ley 28094, de Organizaciones Políticas, habilitando tres “modalidades” para la realización de las primarias: la primera con el voto de todos los ciudadanos inscritos, afiliados o no al partido; la segunda, con el voto de los afiliados al partido; y, la tercera, a través de delegados.

Un cambio sustancial que anularía en la práctica las elecciones primarias abiertas simultáneas y obligatorias (PASO) al incorporar o, mejor dicho, mantener el mecanismo –por delegados o por afiliados– que permite a los partidos, mayormente a sus cúpulas, mantener el control de las candidaturas.

El problema adicional es que, alterando la regulación vigente, los próximos comicios podrían terminar realizándose con más de 20 candidaturas presidenciales. Una dispersión del voto que no favorece en nada a la democracia peruana, como lo demuestra la historia reciente. La ley de elecciones primarias —al poner un mínimo de 1.5% de los votos para seguir en carrera— permitiría reducir las candidaturas a menos de una decena.

Como se ha dicho ya, la propuesta modificatoria no es más que la enésima contrarreforma en que este Congreso se ha embarcado, no contentos, al parecer, con otras que ya han causado grave daño, por ejemplo, a la educación en el país.

Al arremeter contra un mecanismo que fortalecería nuestro sistema político, estos parlamentarios –liderados por el fujimorismo, pero con la anuencia de bancadas como Renovación Popular, Alianza para el Progreso, Somos Perú y Acción Popular– vuelven a ponerse de espaldas a la Historia y al futuro de los peruanos.

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