A pesar de que no estoy de acuerdo con la designación de Manuel Barreto, como jefe de la unidad técnica de menores (UTM) de la Federación (FPF), porque carece de experiencia, ya que -como director deportivo- “apenas” llevaba tres años y dos títulos, tanto así que su hoy subalterno en la Videna, José Bellina, tiene el doble de experiencia, de clubes y la misma cantidad de trofeos; a pesar de que tampoco estoy de acuerdo con que él sea el director técnico interino de la Selección Peruana, porque tiene menos de un año de “veteranía” entrenando en Primera División. A pesar de que creo que existen peruanos y extranjeros mucho más capacitados que él para asumir esos cargos hoy; y a pesar de todo eso, felicito lo que está haciendo y hará con la bicolor hasta fin de año: darle partidos a los más jóvenes (menores de 30 años) y ampliar la base de jugadores seleccionables con los hijos de peruanos en el extranjero.
Así llegaron Gianluca Lapadula y Oliver Sonne antes, así llegó Felipe Chávez (volante del Bayern Münich II) y llegará Fabio Gruber (defensor del FC Nüremberg). Y no solo ellos, pues la lista podría llegar hasta 70, según comentan desde Videna. Saludo el proyecto de Manuel Barreto en la bicolor, de sumarle a los experimentados de siempre, la ‘Generación Z’ y los ‘Eurocausas’, los jóvenes futbolistas peruanos y los hijos de peruanos, que cada vez reclaman más espacio a pesar de las críticas de los resultadistas, que siempre piden lo contrario a lo que ven cuando Perú no suma de a tres: una fecha piden ‘sangre nueva’ y a la otra extrañan a los de más experiencia, y de los falsos nacionalistas, que no soportan ver a peruanos nacidos en Europa o en otras tierras.
Y a los pesimistas les digo: tal vez esa no sea la fórmula mágica para ganar, pero -sin dudas- ayudará.
Felipe Quelopana es brasileño y comentarista de deportes en Perú21.
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