El Poder Judicial se anotó una victoria más contra el terrorismo. El lunes dictó una sentencia histórica contra Sendero Luminoso (SL) y su Movadef. La medida incluye penas para la terrorista Elena Iparraguirre, (a) ‘Miriam’, esposa del fallecido Abimael Guzmán, (a) ‘presidente Gonzalo’; Alfredo Crespo Bragayrac y otros que vivían impunes, induciendo a los jóvenes a enrolarse de manera clandestina en esta organización criminal. La justicia tarda pero llega.
La operación Perseo de 2014, debemos reconocerlo sin mezquindades, tuvo la participación del reconocido oficial del GEIN coronel PNP Eduardo Solís Zevallos —exjefe de la Dircote— y estuvo dirigida por el coronel PNP Oscar Arriola —hoy teniente general—. Asimismo, los agentes especiales de inteligencia Víctor Boza Cachay, Marco Lara Vergara y Oswaldo Maguiña —un héroe fallecido—, entre otros. El equipo además estuvo conformado por agentes de inteligencia del Ejército Peruano que se infiltraron en SL, fiscales y procuradores, a quienes el país les agradece de todo corazón por ser los verdaderos guardianes de la democracia, la vida, la paz y la libertad.
Los terroristas no pudieron con la solvencia de las pruebas instrumentales, periciales, documentales y testimoniares que presentó la Dircote ante la Fiscalía, y hoy estos y sus ayayeros de todos los pelajes, muerden el polvo de la justicia en el Perú. Desde ahora todo aquel que hable o actúe en nombre del “Movadef” o los organismos generados de SL están cometiendo delito de terrorismo por organización y otros ilícitos penales y serán pasibles de la persecución de la justicia, detenidos y encarcelados hasta llegar al banquillo de los acusados.
Lamento la involución del periodista César Hildebrandt, quien pretendió hace pocas semanas “defender” la “legitimidad” de Sendero Luminoso, haciendo gala, como nunca, de una ignorancia absoluta (o una ceguera voluntaria también) sobre el terrorismo en el Perú. Parece que don César ni siquiera entendió a Mao Tse Tung cuando dijo: “Solo tiene derecho a discutir el que ha investigado”. Esto demuestra que el pequeño caballero prefiere la comodidad de vivir en la oscuridad intelectual y en el periodo cuaternario de la historia, y en el basurero de ella también.
Por otro lado, alumnos de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos que se pronuncian contra la sentencia a SL y llaman a otros a seguir esa línea. La ignorancia de muchos jóvenes sobre el terrorismo criminal de SL, que agudizó la pobreza en el país (por la pérdida de más de 35 mil millones de dólares por causas de los sabotajes) y favoreció la destrucción de la democracia, queda evidenciada cuando repiten como “loros”, sin haber investigado el desastre al que los terroristas empujaron al país.
Nuestras felicitaciones a todos los que participaron en la operación Perseo y a los valientes jueces a quienes no les ha temblado la mano para castigar a quienes tienen el credo del terror. Que sigan más operaciones especializadas hasta terminar con los criminales. ¡Sí se puede!
