Lo que debió ser un ascenso fundamentado en méritos y capacidades, se ha convertido en una decisión que castiga a uno de los coroneles investigadores más destacados de la institución policial en los últimos años. El gobierno de Dina Boluarte, sin más argumento, decidió darle de baja al coronel PNP Max Anhuamán Centeno quien hasta hace poco se desempeñaba como el jefe de la Dirección Contra el Terrorismo (Dircote).
En la resolución directorial 6619, a la que accedió este diario, se indica que Anhuamán pasará al retiro el 28 de octubre de 2024 y hasta entonces no tendrá mando ni comando. Pero, qué hay detrás de la salida del exjefe de Dircote, que por sus méritos debió ser ascendido al grado de general. Un reciente operativo llama la atención, pues, está relacionado directamente con el prófugo más famoso del partido Perú Libre, Vladimir Cerrón.
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En diciembre, Max Anhuamán lideró un operativo del que poco se ha comentado públicamente. La información de Inteligencia aseguraba que el fugitivo Cerrón intentaba asilarse en la embajada de Cuba en Lima. De inmediato —según fuentes ligadas al sector Inteligencia— el coronel junto con otras unidades desplegó un destacamento para impedir que el dueño del lápiz se asile en la residencia y lograr su captura. Sin embargo, otra vez, un soplo no permitió que el plan termine con resultados cien por ciento positivos.
La acción de Anhuamán generó la molestia de la embajada cubana, pues, no es la primera vez que este oficial ha tenido en la mira a algunos integrantes de dicha misión diplomática. Es conocido en el sector de Intelivgencia que el coronel ha logrado establecer las conexiones de agentes cubanos con los partidos y movimientos socialistas asentados en nuestro país. Uno de estos grupos políticos fue Perú Libre.
