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Los fiscales y policías protagonistas de 2023
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El 2023 vio caer a una figura que prometía ser la principal garantía contra la corrupción. Patricia Benavides, la fiscal de la Nación que enfrentó al golpista Pedro Castillo, usó su cargo para asegurar ilícitamente su permanencia en el poder.
Su asesor de confianza, Jaime Villanueva, presentó las evidencias tras acogerse a la colaboración eficaz. Confesó que su jefa negoció con legisladores el archivamiento de investigaciones penales a cambio de deshacerse de quienes consideraba sus principales amenazas: la exfiscal suprema Zoraida Ávalos y la Junta Nacional de Justicia (JNJ).
Pero luego, en línea con esos acuerdos subrepticios, consiguió la suspensión del fiscal superior Rafael Vela, el coordinador del equipo especial Lava Jato, y removió a la fiscal Marita Barreto, la coordinadora del equipo especial que puso contra las cuerdas a los cómplices de Castillo y a los congresistas denominados ‘Los Niños’.
Vela, quien era también coordinador de la Fiscalía de Lavado de Activos, es un objetivo de los grupos políticos cuyos directivos están investigados.
No es la primera vez que padece la arremetida de su propio superior. En 2018, el nefasto Pedro Chávarry lo retiró del caso Odebrecht, aprovechando las vísperas del Año Nuevo 2019, para complacer a los intereses del Parlamento.
Benavides se pasó al bando que prometió derrotar, aunque sus planes no le duraron y, pese a mellar la imagen del Ministerio Público, con su accionar permitió que la ciudadanía constate el valor que Barreto, ya repuesta en su cargo, y Vela tienen para luchar contra organizaciones criminales compuestas por autoridades políticas.
Colchado y Lozano otra vez
Cada diligencia dispuesta por el equipo de la fiscal Barreto estuvo acompañada del dúo policial integrado por los coroneles PNP Harvey Colchado y Walter Lozano, conocido como ‘Bica’.
La estrategia desplegada para detener, por ejemplo, al exasesor Villanueva fue diseñada por los oficiales e inmortalizada en una foto en la que se ve a fiscales y policías coordinando la operación ‘Valkiria V’ y de fondo, en un pizarrón, se aprecia el organigrama de la red encabezada por la suspendida Benavides.
Colchado y Lozano son ahora cuestionados por un sector político y de medios que antes, cuando estaban tras los pasos de los compinches de Pedro Castillo, los idolatraba.
Ambos también estuvieron presentes en la Prefectura en la que el exmandatario permaneció detenido tras intentar su golpe de Estado del 7 de diciembre de 2022.
Colchado ha demostrado que no tiene bandera política y que solo hace su trabajo, como él mismo explicó en una entrevista con Perú21.
“No somos políticos, investigamos los hechos delictivos y no vemos qué línea política tiene la persona; puede ser de izquierda, derecha o centro”, sostuvo.
La tenacidad y el coraje de estos fiscales y policías son los que han evitado que los intereses políticos logren la impunidad que tanto ansían gozar.
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