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Reconstrucción toma impulso con convenio de gobierno a gobierno
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“Esperemos que esta vez no nos mientan”, dice Alba López, una joven madre piurana desde el otro lado de la llamada. Han pasado casi dos meses desde que el gobierno de Martín Vizcarra suscribió un convenio con su par de Reino Unido para reconstruir el norte del país, pero ya pasaron tres años desde que el Fenómeno El Niño Costero arrasó con todo a su paso en Piura, Tumbes, Lambayeque, La Libertad y otras diez regiones.
Se perdieron 64 mil viviendas, 12,832 kilómetros en carreteras, más de 500 puentes, más de 2,800 escuelas y 934 centros de salud, de acuerdo al Indeci. Según la consultora Macroconsult, la destrucción material ascendió a US$3,100 millones. Una catástrofe. Y pese a ello, en tres años solo persiste la promesa de recuperar los daños. Así como Alba, miles de norteños dejaron de creer.
Amalia Moreno es la cuarta jefa de la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios (ARCC). Bajo su gestión el Perú firmó el acuerdo con Reino Unido para, de una vez por todas, empezar con las obras.
Según el mismo contrato, en abril de 2022 se debe haber concluido con lo acordado: 74 escuelas, 15 centros de salud y 7 drenajes. Es poco en relación a las pérdidas, pero es difícil construir en dos años lo que se levantó en 30 o 40 años.
Y toma más tiempo aún edificar cimientos que no existían por negligencia, falta de recursos o incapacidad de gestión de las autoridades. Los problemas de siempre.
LOS PRIMEROS PASOS
En la página web de la ARCC se informa que la inversión inicial para la ejecución de obras es de S/7 mil millones. Pero el presupuesto es mucho mayor y asciende a 25,655 millones de soles.
De ese monto, S/5,446 millones servirán para contener los embates de futuros Niños: se construirán diques y defensas ribereñas en 19 ríos y 5 quebradas. La ARCC lo califica de “soluciones definitivas”.
Solo para la reconstrucción, se destinarán S/18,505 millones. Esto comprende pistas, veredas, carreteras, campos de cultivo, saneamiento, centros de salud y escuelas. Estas dos últimas son la prioridad.
“Estamos en plena convocatoria a concurso, el registro de empresas participantes termina el miércoles; para octubre ya deben estar empezando a construirse 36 colegios y nueve centros de salud, de los cuales tres serán hospitales”, manifestó Moreno a Perú21.
El último jueves fue el Roadshow, la exposición de las obras a las compañías interesadas en invertir. En ese evento estuvo la embajadora británica Kate Harrison, quien con su presencia garantizó el objetivo del convenio gobierno a gobierno, o G2G (goverment to goverment, en inglés): la asistencia técnica del Reino Unido.
El gobierno británico no realizará ninguna obra, su función es hacer recomendaciones para sacar adelante cada uno de los proyectos. Para ello se diseñó un plan que la ARCC deberá cumplir fielmente si quiere lograr los resultados esperados. Moreno explica mejor en qué consiste el trabajo de los europeos.
“Reino Unido es como el profesor que está a tu lado y te enseña cómo hacer los ejercicios de matemáticas, te orienta y te dice cómo mejorar, pero finalmente eres tú el que se encarga de resolverlos”, detalló.
Así parece sencillo todo, incluso inspira confianza que otro gobierno intervenga para promover un concurso limpio y parejo. Pero, ¿El G2G es la mejor fórmula para combatir la corrupción?
LOS CONTRATOS
El Reino Unido se encargará de las contrataciones. Las reglas bajo las que concursarán las empresas son avaladas por la ARCC, pero no se regirán por la normativa peruana sino por normas británicas, según Moreno. La idea es que las licitaciones sean ágiles y en eso no ayudan las leyes peruanas que, para evitar irregularidades, son excesivamente burocráticas.
Aún así quedan dudas sobre la transparencia con la que se puedan concretar las adjudicaciones. Para despejar sombras se autorizó la participación de la Contraloría, que tiene acceso a todas las etapas de la construcción. Eso está estipulado en el convenio.
Es más, ya emitió dos informes de control. En uno de ellos,al que accedió este diario, cuestiona los criterios de calificación del concurso que ganó el Reino Unido. Si bien concluye que no advirtió “situaciones adversas”, señala que se debe a la poca claridad en el criterio de evaluación.
La otra garantía es el mismo gobierno británico, que se juega su reputación si estalla algún escándalo de corrupción. Ya no hay marcha atrás.
DATOS:
En la primera etapa de reconstrucción está prevista la edificación de 15 colegios en Piura, 10 escuelas en Áncash, 5 en Lambayeque, 4 en La Libertad y 2 en Tumbes.
Además, un hospital en Chulucanas (Piura) y otro en Pomabamba (Áncash); un centro de salud en Castilla, El Faique y Limón (Piura); en Yungar, en San Nicolás (Áncash) y otro en Posope Alto (Lambayeque).
Son S/1,254 millones destinados para la construcción de 40,088 viviendas. De esa cifra, ya hay 20,866 casas culminadas.
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