¿Cómo explicar los incendios forestales?
Los amazónicos hemos sufrido mucho con estos últimos incendios. Estas temperaturas de nuestro planeta parecieran confirmar que se está produciendo un cambio climático. Es una alarma roja que la naturaleza le está dando a la humanidad para reaccionar, tomar acciones y evitar una catástrofe en los próximos decenios.
Pero también hay quema agrícola no controlada…
Siempre ha habido incendios, pero últimamente se están intensificando. Este incremento podría tener una explicación de múltiples factores. Muchos pueden ser causados por la acción irresponsable, accidental o criminal de seres humanos. Pero también es verdad que se dan más incendios cuando hay más deforestación; eso no se puede negar.
Mira: Partido político de Roberto Chiabra logró su inscripción en el JNE
Dice que la Amazonía puede volverse un desierto.
Es verdad. Es un peligro. Y no lo decimos por crear alarma o zozobra. Hay estudios científicos que predicen que, si los bosques tropicales llegan a un 25% de deforestación, sería irreversible que se conviertan en desiertos. En nuestra Amazonía ya estamos en 12% o 13%. Pero no vamos a esperar a estar al borde para preocuparnos. Es el mayor pulmón del mundo, la mayor diversidad y la mayor reserva de agua potable. No sería solo catastrófico para el Perú, sino para la humanidad.
¿Cómo desarrollarnos sosteniblemente?
Con un plan estratégico que involucre a la Amazonía peruana, que es el 62% del territorio. La meta es parar la deforestación en los próximos 30 años, pero también las actividades ilícitas que contaminan los ríos y matan la biodiversidad, como el narcotráfico y la minería ilegal. Estas son el 95% de las actividades económicas de la Amazonía y pueden llevar al Perú a una catástrofe social. Los emprendedores deben desplazarlas. No hay otra manera. Lo demás es humo. Necesitamos una especie de Plan Marshall para salvar la Amazonía peruana. Eso implica cerrar las brechas sociales en salud y educación, inversión en infraestructura, conectividad, y crear una policía ecológica.
Estas economías ilegales también generan la violencia en que vivimos.
El problema más grave que tenemos es, obviamente, la inseguridad ciudadana, patrimonial y jurídica. Si la Amazonía tiene el 95% de actividades ilícitas, el Perú tiene un 70%. Son pocas las empresas formales que soportan toda la carga tributaria. Eso no puede continuar. Nos vamos a volver un país bananero. En la Amazonía los niveles de pobreza extrema, violencia, anemia y parasitosis son escalofriantes, los peores del país. Tenemos 203 años de independencia y seguimos como país fracasado. Pero hay una luz al final de este túnel oscuro.
Hay una luz al final del túnel, que es un tren.
Es como si el tren viniera a toda velocidad a colisionar y destruir todo. El problema es gravísimo. Seguimos como país fracasado, parafraseando el libro de Acemoglu y Robinson, “¿Por qué fracasan los países?”. Pero hay una oportunidad. El país hay que ordenarlo, disciplinarlo y recuperarlo. Hay que unirnos para evitar la metástasis que va a destruir la nación.
Estamos muy polarizados.
Estamos tan divididos. No es posible que tengamos el récord de Guinness con un proceso electoral al 2026 con aproximadamente 60 partidos en carrera. Eso muestra el grado de desorden y descomposición social, económica y política que tenemos que corregir. Entrar con 60 partidos a unas elecciones presidenciales va a ser fatal para el Perú. Ojalá logren unirse en cinco o no más de diez alianzas, y ojalá que los nuevos líderes sean peruanos ilustres, íntegros, decentes, honestos. Tenemos que ser optimistas. Si somos pesimistas, puede ser fatal.
“No hay institución que se salve de la corrupción”
También hay nuevos líderes que son radicales.
El pueblo es inteligente. Yo creo que el pueblo se da cuenta de quién hace propuestas utópicas o radicales que en ningún país ha llevado a la felicidad ni al desarrollo de sus pueblos. Eso se va a decantar en el camino. El pueblo se da cuenta de las bondades de trabajar en paz. Hoy día no hay alguien que pueda decir que el comunismo es la solución. Al contrario, los comunistas están retrocediendo. Vietnam, Rusia y China son finalmente capitalistas. Casi 50 años de giro económico. Tenemos que ponernos de acuerdo bajo un acuerdo mínimo. El Acuerdo Nacional ha intentado, pero fracasa. Dicen que el peruano es enemigo de otro peruano, que no nos ponemos de acuerdo, pero creo que sí hay espacio de diálogo. Ojalá a los nuevos líderes se les encienda la luz. Hay que hacer cambios disruptivos para que el crimen no prevalezca y baje la informalidad, para que se cierren brechas, pero no haya corrupción.
Usted estuvo en el viaje oficial a China.
El Perú tiene que abrirse a todas las inversiones del extranjero. Toda inversión sana es bienvenida, con transparencia y sin condicionamientos. En todo el mundo se mueven capitales limpios, pero también oscuros. No solo en el mundo capitalista, donde hay más control y transparencia. China no es la excepción a eso. También ahí no todo es muy transparente, porque no hay un Gobierno abierto, democrático y transparente. Entonces, hay que tener los ojos más abiertos todavía para que esos capitales ingresen muy chequeados.
Se habla del puerto de Shenzhen como el modelo de crecimiento para Chancay. Usted estuvo ahí.
Era un puerto como Chancay hace unos 50 años. Deng Xiaoping hizo el cambio liberal. Esta ciudad pobre de menos de 40,000 habitantes tenía altos índices de criminalidad e informalidad. Hoy, viven allí 12 millones de habitantes, tiene alta tecnología y es más segura que Miami. No podemos imitar el modelo chino porque allá hay partido único y no hay democracia. No quiero decir con eso que haya que aplicar ese modelo en el Perú, donde hay plena democracia, y excesiva tal vez, prácticamente hay casi anarquismo. Allá primero se hace y después se pide permiso. En un país democrático es más difícil que en China. Pero sí podemos lograr acuerdos entre peruanos. No puede reinar la impunidad. No hay institución que se salve de la corrupción. Algo que podemos aprender es la estabilidad política, económica y social. El crimen organizado está asaltando al país.
¿Cómo mostrar la mejor cara en el APEC?
Tampoco podemos ocultar que el Perú está a la cola de la formalidad. De las 21 economías somos la que más informalidad tiene. No vamos a poder negar nuestra realidad. Seremos buenos anfitriones, pero tenemos mucho que aprender y corregir de economías como las de Estados Unidos, Japón, Singapur, Corea del Sur, Nueva Zelanda. Hay que usar ese foro para impulsar el crecimiento y los tratados de libre comercio.
¿Cuál sería el perfil del presidente de 2026?
Necesitamos estadistas, patriotas: preparados, cultos, buenos líderes, íntegros, honestos. La mayoría de peruanos es gente buena. Estoy seguro de que el pueblo va a apoyar una alternativa así. No quiero hablar de personas, pero por ahí hay algunas figuras. Yo creo que va a salir un peruano que logre aglutinar a muchos partidos en un frente, pacto o alianza, y que logre presentar el sueño de un país que se enrumbe hasta el desarrollo sostenible e inclusivo en una visión de largo plazo. Porque un Gobierno solo no va a arreglar esto, pero, si hay un plan de hacerlo en tres decenios, con un plan estratégico bien elaborado, creo que el pueblo puede comprar ese sueño. No me extrañaría que no sea alguien que conocemos, sino que incluso puede ser un outsider de entre los 60 candidatos al 2026. La esperanza no hay que perderla.
Ha hablado de la falta de seguridad jurídica.
¿Cómo es posible que hoy en día los criminales tengan más derechos que la gente honrada? ¿Cómo es posible que se persiga a la gente honesta que paga sus impuestos y se les aplique leyes como si fueran criminales? Estamos en un país patas arriba. La Policía, la Fiscalía y el Poder Judicial a veces funcionan bien, pero a veces se desentienden. Las leyes están mal hechas y se aplican a favor de los criminales. La última ley que hizo el Congreso; tienen que reconocer que no funciona. Esta ley de las bandas criminales... Han querido remediar algunos abusos de intervenciones exageradas que afectan la dignidad de inocentes, pero se han ido al otro extremo. No pueden entrar porque no llega el abogado.
¿Qué sugiere hacer?
Los peruanos de bien tenemos que exigir, como ahora han salido los transportistas. Todo el pueblo peruano tiene que salir y exigir que haya orden, que se pare el crimen, la corrupción, la inseguridad, las mafias, la informalidad. Pero tenemos que reaccionar. Si reaccionamos a tiempo, en 30 años podemos ubicarnos entre los países más felices y desarrollados.
¿Se acabará el antivoto en 2026?
Ahí tienen una gran responsabilidad los líderes de los 60 partidos inscritos. Si realmente aman al país, los peruanos los invocamos a que se sienten y conversen, que hagan planes conjuntos. Tiene que haber una ruta donde podamos coincidir. No satanizar el libre emprendimiento. Formalizar sin tanta presión. Que el IGV baje al 5% y vemos de dónde sacar otros impuestos; tener un número único para el DNI, el RUC y otros documentos; que todos estén en una red con sus antecedentes. Hay que abrir el Perú para todos. Pero eso necesita de un Gobierno fuerte que salga del pueblo. Ni radicalismos de extrema derecha ni de extrema izquierda. Tenemos que ir por el centro democrático.
“¿Por qué Añaños no puede candidatear en cualquier partido?”
Fue lamentable que la candidatura de Añaños haya caído por líos internos.
La verdad, conociendo a don Carlos Añaños y su patriotismo, y sus valores como emprendedor y peruano, es lamentable lo que ha pasado. Pero también hay que entenderlo. Él no puede candidatear en un partido que no tiene sus estatutos bien alineados a un proceso democrático y de selección de candidatos que le de garantía de que sus congresistas van a ser gente intachable, proba, libre de condenas penales y con buena reputación. Porque si no va a ser lo mismo. Yo creo que en el país sabemos que sse es nuestro talón de Aquiles. Convivimos con la corrupción, con el crimen con la informalidad y la impunidad. Y la verdad el señor Añaños, para pena de todos los peruanos, ha tenido que dar un paso al costado.
¿Se repetirá en otros partidos?
Hay también informalidad en la ley. ¿Por qué un señor Añaños, con ese perfil, no puede candidatear en cualquier partido? ¿Por qué hay una ley que lo amarra? En Estados Unidos cualquier ciudadano puede candidatear sin estar inscrito. Hay que hacer un cambio de la ley antes de las próximas elecciones.
VIDEO RECOMENDADO
