Hace veinte años, la historia del Perú cambió considerablemente. La llegada del gas de Camisea a través de 730 km de ductos subterráneos transformó la matriz energética del país. gran parte de la energía pasó a ser producida con un combustible mucho
más económico, más limpio y seguro; impulsando la industria nacional, propiciando el desarrollo del país y cambiando para siempre una parte esencial de la vida de las familias peruanas.
El sistema de transporte por ductos de TGP, es como la columna vertebral del abastecimiento energético del país, pues a través de él, se transporta todo el gas producido en Camisea, con el que se genera cerca de la mitad de la energía eléctrica del país y los líquidos del gas natural con los que se produce más del 85% del GLP a nivel nacional; generando ahorros para todos los peruanos y un impacto positivo enorme en la competitividad de la industria.
Un ahorro que ya ha sumado más de 110 mil millones de dólares al país. Asimismo, esta infraestructura hace posible que el gas llegue a más de 1,9 millones de hogares y alrededor de 405 mil vehículos que emplean GNV.
UN DESAFÍO CONSTANTE
Pocos saben que este gasoducto es uno de los más desafiantes y complejos del mundo y que para operarlo, el equipo de tgP debe superar y convivir con condiciones climáticas y geográficas muchas veces extremas.
“Somos responsables de un sistema clave para el país, por ello contamos con tecnología de punta que nos permite controlar y monitorear todo el sistema en tiempo real, las 24 horas del día, los 365 días del año de manera segura y eficiente”, sostiene su gerente general, Tomás Delgado.
Asimismo, para asegurar la integridad y estabilidad del sistema, realizan labores de mantenimiento permanente y obras de ingeniería de gran envergadura, en las que se emplean más de 3 millones de horas hombre e invierten $100 millones al año.
“Uno de nuestros más grandes orgullos es haber logrado mantener en estos años un factor de disponibilidad del 99%”, agrega.
COMPROMISO CON LA SOSTENIBILIDAD
El equipo TGP tiene un férreo compromiso con la seguridad, el medio ambiente y sus comunidades vecinas. el éxito de sus operaciones no sería posible sin la estrecha relación que mantienen con las más de 189 comunidades vecinas. Un diálogo constante y respetuoso han sido clave para mantener una relación positiva y duradera.
Asimismo, llevamos a cabo ambiciosos programas de monitoreo y preservación de algunos de los ecosistemas más biodiversos del
planeta y con esa misma responsabilidad, preservamos la historia y ponemos en valor el patrimonio cultural de nuestro recorrido.
Han sido dos décadas de aprendizaje y crecimiento, respondiendo siempre a las necesidades del país. sin embargo, aún quedan retos pendientes, en especial en el desarrollo de infraestructura para el transporte de gas natural, que permita llegar a nuevas regiones y lograr la ansiada masificación.
“En TGP estamos comprometidos con el país y deseamos contribuir a superar esta brecha. estamos decididos a participar de esta tarea vital para consolidar la seguridad energética del Perú y seguir apostando por el país. Mientras otros descansan, nosotros seguimos adelante, porque sabemos que el Perú no puede detenerse ni un segundo, y nosotros tampoco”, finalizó.