¿Tu perro ladra cuando tienes compañía? Aquí te explicamos cómo controlarlo

Las razones por las que el perro ladre son variados, pero frecuentemente tienden a hacerlo para llamar la atención o mostrar su desconfianza. No lo tienden a hacer de malicia, pero sí llegan a incomodar varias veces. Para evitar esto, algunos consejos se les recomienda a los dueños:

El autocontrol es una manera de educar a fortalecer la mente. Puede llegar a aprenderse, y muestra fortaleza y éxitos en los seres humanos. Para los perros, esa capacidad para aprender a lidiar con la paciencia y la frustración está latente desde los 3 meses, por lo que es recomendable enseñarles trucos en casa con trozos de comida para dominar el autocontrol.

Comida a la mano. Ponga unas bolitas de comida en la mano y extiéndala hacia el perro, antes de que se abalance sobre la comida cierre el mano. Si el perro actúa con control, luego le premias.

Muchos perros también ladran por cuestión de seguridad y falta de defensa. Al estar entre extraños, se sentirán con más ganas de ladrar.

Para calmar sus instintos, intenta impulsar el “efecto madriguera”, una zona donde ellos puedan cobijarse y encontrar seguridad. Es muy fácil conseguir ese efecto, ya que en muchos hogares, los perros establecen sus zonas de confort entre almohadas y cojines. Para lograr ese efecto cuando lleguen visitas, deja sus juguetes favoritos ahí, o fomenta que tome siestas a esas horas en particular en otros días, para cuando el día que vengan las visitas, se encuentre más interesado en jugar en su “hueco” que montar un espectáculo.

Enseñar control a un perro es difícil, pero no imposible.