¡Atención! Entre marzo y abril se tendrán niveles de radiación UV extremadamente altos y dañinos para la salud

Colócale protector solar. El protector solar es súper importante, por ello elige un bloqueador con factor de protección solar (FPS) de 50 a más que cuente con amplia defensa contra los rayos UVA y UVB. Al momento de aplicarlo deberás cubrir todas las zonas que estarán expuestas al sol como el rostro, el cuello y los hombros. Recuerda que debes aplicar el bloqueador todos los días durante todo el año y de preferencia por las mañanas. Para lograr una protección exitosa enséñale a tu hijo que debe volver a aplicarlo cada media hora antes de salir al recreo y a la hora de la salida.

Cubre su piel: Incorpora al uniforme escolar el uso de sombreros de ala ancha que protejan el rostro, el cuello y las orejas. Recuerda que si en caso no hay mucho brillo solar puedes vestir a tu hijo con prendas de manga larga y pantalones largos que sean frescos y holgados.

Evitar las horas de mayor radiación solar: Otro consejo muy útil es evitar que tu hijo esté expuesto directamente al sol, en especial entre las 10:00 am y las 4:00 pm que son los horarios donde hay mayor radiación UV. Conversa con él y explícale la hora más recomendable para salir a jugar sin dañar su piel.

Una dieta saludable: Los alimentos ricos en antioxidantes, incluidas las vitaminas y otros nutrientes, pueden ayudar a combatir los rayos UV y prevenir el daño que la sobreexposición causa en la piel. Dentro de su lonchera incorpora frutas, vegetales y grasas saludables como la sandía, arándanos, cerezas, tomate, espinaca, brócoli y frutos secos.

5. Siempre hidratado: La hidratación influye mucho en el cuidado general del organismo, más aún en las temporadas donde hay mayor radiación solar pues la piel se deshidrata. Por ello, es importante hidratarse desde antes de exponerlo al sol. Para mantenerlos bien hidratados, los niños de 1 a 3 años necesitan aproximadamente 4 vasos de agua al día. Esto aumenta a 5 vasos para los menores de 4 a 8 años, y a 7 u 8 vasos para los más grandes. Recuerda complementar en sus loncheras una botella de agua o de refresco natural.

Finalmente, recuerda que los daños a la piel se acumulan a lo largo del tiempo; sin embargo, es en la niñez cuando esta es más delicada. Si le brindas a tu hijo esta educación preventiva desde pequeño, cuando crezca sabrá cuidarse por sí solo. La prevención es clave para una niñez y una adultez sana. Conoce más sobre el cáncer en AQUÍ.