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EsSalud brinda recomendaciones para evitar el golpe de calor
Niños y adultos mayores son los más afectados y podrían sufrir deshidratación severa y, en casos extremos, insuficiencia renal.
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Las altas temperaturas que se registran en la capital y en otras partes del país pueden ser muy peligrosas para los adultos mayores y niños menores de 5 años al provocar el denominado “golpe de calor”.
Este problema de salud puede generar efectos negativos como deshidratación severa, debilitamiento del sistema inmunológico, confusión mental, taquicardia, insuficiencia respiratoria y, en casos extremos, insuficiencia renal.
Así lo advierte el doctor Jorge Luis Solari, médico internista del Hospital Edgardo Rebagliati de EsSalud, que además asegura que esta afectación ocurre generalmente como consecuencia de la exposición prolongada y el esfuerzo físico en altas temperaturas.
“El golpe de calor es la forma más grave de lesión por calor y puede ocurrir si la temperatura del cuerpo alcanza los 40 grados o más, sin tener ninguna enfermedad o infección”, señala el especialista.
Por ello, recomienda beber abundante agua (entre 2 a 3 litros al día) para evitar la deshidratación, usar sombreros de ala ancha, vestir ropa holgada de algodón, así como mantener las viviendas y lugares de trabajo ventilados.
El especialista instó a la población a evitar la excesiva exposición solar, sobre todo entre las 11 y 16 horas, evitar el consumo de alcohol, comidas muy abundantes y grasosas o con alto contenido de azúcares.
Asimismo, recomendó practicar actividad física para tener un buen estado de salud y mantener la flexibilidad de los músculos. Lo ideal es que sea por la mañana, muy temprano, o en las últimas horas de la tarde.
En el caso de los adultos mayores, es importante que estén hidratados frecuentemente, ya que por su edad, y a pesar de tener sed, no suelen ingerir líquidos y están propensos a la deshidratación.
Recomendaciones para los padres
El especialista de EsSalud precisó que se debe evitar la exposición de los niños a las altas temperaturas porque su mecanismo termorregulador no consigue regular su temperatura corporal debido a que se encuentra aún en desarrollo.
“Los menores generalmente se encuentran en permanente actividad, por ello deben consumir abundante líquido según su edad, como agua hervida fresca y jugos hechos a base de productos naturales, además de recibir la alimentación que les corresponde”, indicó.
Se recomienda que los padres vistan a sus niños con ropa ligera de algodón, no abrigarlos demasiado ni exponerlos al sol, así como bañarlos con frecuencia y ubicarlos siempre en lugares frescos o donde exista ventilación.
“En caso de presentar síntomas, es importante acudir de inmediato al establecimiento de salud más cercano y aplicarle paños de agua tibia durante el trayecto al servicio de emergencia. Si aún está en casa, podría optar por bañar al paciente con agua tibia”, precisó el especialista.
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