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La esperanza de Pedro Cadenas se llama Mistura: "Este pechito come tarwi" [FOTOS]
Este agricultor natural de Áncash ha encontrado en esta feria gastronómica una imperdible oportunidad para sacar adelante a su familia. Esta es su historia.
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Mistura 2017: Pedro Cadenas, el maestro del tarwi que no se rinde tras perderlo todo por El Niño. (Renzo Salazar/Perú21)
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Mistura 2017: Pedro Cadenas, el maestro del tarwi que no se rinde tras perderlo todo por El Niño. (Renzo Salazar/Perú21)
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Mistura 2017: Pedro Cadenas, el maestro del tarwi que no se rinde tras perderlo todo por El Niño. (Renzo Salazar/Perú21)
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Mistura 2017: Pedro Cadenas, el maestro del tarwi que no se rinde tras perderlo todo por El Niño. (Renzo Salazar/Perú21)
Fecha Actualización
A casi 2,200 metros sobre el nivel del mar se ubica el distrito de Mato, uno de los diez que conforman la provincia de Huaylas (región Áncash). Pedro Cadenas Vacas nació hace 50 años en esta tierra, la cual rebalsa de historia y de peruanos que no bajan los brazos a pesar de que un aciago terremoto los enterró en 1970.
De esa misma fuerza que caracteriza a los ancashinos está hecho Pedro, quien es agricultor y cada vez que se le pregunta de dónde es, alza la voz orgulloso y dice: “Yo soy del caserío de Ancoracá y vengo por primera vez a Lima por Mistura”.
Esta feria gastronómica que se desarrolla hasta el 5 de noviembre en el club Revólver de El Rímac lo ha acogido con los brazos abiertos. Su emoción al estar en la capital para un evento importantísimo delata su felicidad que se dibuja en su rostro tostado, producto de sus años que viene trabajando en el campo desde niño.
Pedro cultiva tarwi —o también llamado chocho, un grano que, según el Ministerio de Agricultura y Riego es muy similar a la quinua en cuanto a su “calidad de proteínas que aporta, aminoácidos esenciales y minerales necesarios para una adecuada nutrición”.
EL MALDITO NIÑO:
Sin embargo, para este descendiente neto de familia campesina, este 2017 “ha sido un fracaso” por las pérdidas de sus cosechas que ascienden entre 80 y 90 por ciento. ¿La razón? La humedad de las intensas lluvias producidas por el fenómeno de El Niño costero a inicios de este año pudrió todos sus frutos.
“Mi sustento es el tarwi y, por el momento, es a lo que me quiero dedicar. Mi próxima cosecha recién saldrá en 8 meses. Es un tiempo largo pero tenemos que esperar”, lamenta Pedro mientras observa de cerca su puesto ubicado en el ‘Gran Mercado’ de Mistura.
No obstante, esas ganas emprendedoras de él vuelven a animarlo y nos advierte que “espero que el próximo año lo traigamos (el tarwi) en forma de harina porque estamos viendo en levantar nuestra planta de tratamiento de harina en el Callejón de Huaylas”.
LA RECONSTRUCCIÓN NO LLEGA:
En los meses en que el fenómeno de El Niño costero se encontraba en su máxima intensidad, fue justamente Áncash una de las regiones más afectadas. El Gobierno llegó a declarar hasta a 166 distritos de esta región en estado de emergencia.
Huaylas, la cuna de Pedro, sufrió los estragos de las inundaciones. La destrucción tocó sus puertas y, de acuerdo con él, “solamente nuestro alcalde provincial nos ayudaba algo”. “Nosotros mismos sacábamos el agua que se estancaba… ¡sin máquinas!”, exclama.
Mientras sonríe con resignación, culpa a sus dos ex gobernadores regionales (César Álvarez y Waldo Ríos, hoy presos por casos de corrupión) de no dar el apoyo que merecen sus paisanos.
“Hasta el momento, no recibimos nada por parte del gobierno. En mi vista, hasta ahorita no hay nada todavía. Ojalá la ayuda llegue mi región porque hemos tenido problemas con nuestros presidentes regionales. Los dos anteriores están en la cárcel por la corrupción. De repente, por eso es que no viene la ayuda nosotros”, manifiesta.
NO BAJA LOS ÁNIMOS
A pesar de esta podrida realidad de la que es consciente Pedro, él confía en que Mistura pueda darle ese impulso que necesita para que nuevamente resurja de las cenizas, o mejor dicho, desde el barro. Pero encuentra un pequeño obstáculo:
“A los limeños les ofrecemos nustro producto para que nos compren. Pero, por el momento, no estamos vendiendo mucho y creo que es poque desconocen del valor nutricional que tiene nuestro tarwi”, reconoce con cierta pena.
Pedro, que no supera el metro sesenta de estatura, le deposita (por ahora) toda su confianza en los demás productos que siembra. “El trigo, la papa, el olluco y las alverjas, son mis otros productos y con esos cubrimos por ahora nuestras necesidades”, afirma.
Mistura, más allá de ser solo un evento gastronómico, significa para varios agricultures del interior del país una oportunidad para expandir sus negocios y, también, su calidad de vida. Antes de suspirar, reflexiona lo siguiente: “Mis hijos tienen otra mentalidad distinta a la mía y quiero que progresen. Quién, acaso, no quisiera para ellos lo mejor”.
DATOS:
* Pedro Cadenas Vacas pertenece a una de las veinte asociaciones agrícolas que reúne la ONG Fondo Ítalo Peruano (FIP). Hasta 400 agricultores tiene bajo su responsabilidad.
* 'El Paraíso de los Andes de Ancoracá' es el nombre de la asociación de Pedro Cadenas y la fundó junto a su socio Donato Mendoza Baylón. En ella, trabajan 15 agricultores.
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