PUBLICIDAD
"El Perú es un país maravilloso, nos sorprende siempre"
“Soy piurana y nunca me sentí menos. Al contrario. Y siempre me digo ‘antes muerta que sencilla’”, nos dice Mara Seminario, exdirectora de Promperú.
Imagen
Fecha Actualización
Mara Seminario,EjecutivaAutor: Gonzalo Pajares.gpajares@peru21.com
Mara Seminario dirigió Promperú (2006-2010) y fue viceministra de Turismo (2010-2011). Con esta experiencia ha escrito País multidestino (Aguilar), libro que hoy, a las 7:30 p.m., Alan García presenta en el Miraflores Park Hotel (Malecón de la Reserva 1035).
Eres piurana. ¿Te sientes orgullosamente provinciana?Claro. Soy una provinciana militante. Me encanta tener un apellido – Seminario– con identidad piurana. Mucha gente escondía su origen, pero hoy veo con gusto que hay un 'orgullo provinciano'. Por eso, yo digo que soy de Piura, de la Unidad Vecinal.
¿Te chocó venir a Lima?Las piuranas somos muy directas y francas, siempre decimos lo que pensamos. No puedo dejar de ser auténtica. Soy como soy, siempre y en todo escenario. Lima no me cambió y hasta me he propuesto no abandonar mi acento piurano.
Estudiaste en la U. de Piura. ¿Estás cerca del pensamiento del Opus Dei?Estoy cerca del pensamiento de la doctrina católica. Yo quiero mucho a la gente del Opus Dei porque, gracias a su labor, en Piura hay una gran universidad y los piuranos –de todas las clases sociales– no tenemos que salir de nuestra tierra en busca de una buena educación. Esto es un regalo de Dios.
¿Recuerdas tu primer viaje?Sí. Nosotros viajábamos mucho entre Sullana y Piura, y aunque hoy esa travesía no dure más de media hora, de niña la sentía como toda una aventura: el desierto y su aridez, las cabritas y sus pastores.
¿Te gusta viajar?Nunca fui una gran viajera, diría que soy una viajera urbana. Me gusta mucho la ciudad. Hace seis años solo existían Cusco y Machu Picchu como destinos turísticos. La gente pensaba que Lima estaba en los Andes, que las llamas paseaban libres por las calles. Hoy, Lima ya es una realidad, y hemos trabajado para que esto sea así. El Perú es un país maravilloso, nunca dejará de sorprendernos. País multidestino, mi libro, nació así: alguien, al ver tantos turistas en Lima, me dijo: "Qué suerte que tanta gente nos visite (risas)", cuando detrás de eso hubo, y hay, un esfuerzo inmenso, un trabajo planificado.
¿Qué otras motivaciones tuviste al escribirlo?Primero, quiero devolverle a la gente la fe en el sector público. Cuando hay continuidad en las políticas, cuando hay permanencia de la gente, cuando hay un trabajo profesional, cuando hay compromiso, las cosas funcionan. Segundo, quiero ser justa con el gran equipo que hubo –y hay– en Promperú. El Mincetur debe ser visto como ejemplo en 'permanencia técnica'. Por ejemplo, la Marca Perú nació allí, en nuestras reuniones, y desde el principio la manejó Mariela Soldi. Con este equipo replanteamos el sentido del turismo en el Perú.
Rafo León dice que gracias a Promperú se 'desfolcloriza' la noción de turismo en el Perú…Absolutamente. Pero no solo fue eso. Antes había mucha caricatura acerca del turismo en el Perú. Nosotros nos propusimos mostrar lo mejor del Perú, un país anclado en un pasado maravilloso, pero que va camino a la modernidad. Cuando asumí la dirección de Promperú, no figurábamos como destino rico en historia. El 'click' se dio cuando Machu Picchu fue elegido como una de las Nuevas Siete Maravillas. Y esta elección fue producto de una decisión estatal. Nos gastamos apenas 30 mil dólares, cifra que hoy parece pequeña –sin embargo, tuvimos que pasar el sombrero–, pero, ¿y si no nos elegían?
Vivimos un boom gastronómico. ¿Cuán responsable es Promperú de esto?Este es un perfecto ejemplo de un buen trabajo coordinado entre los sectores público y privado. El Estado proporcionó una plataforma para la promoción de nuestra gastronomía, y los cocineros aprovecharon esta oportunidad. Javier Wong, Héctor Solís, Teresita Izquierda, Gastón Acurio, Marisa Guiulfo y muchos más dejaron sus restaurantes por hacer giras con Promperú, no les pagamos nada, y todo lo hicieron –y hacen– por amor al Perú.
¿Cuál fue su estrategia para poner al Perú en el mundo?Miramos las tendencias de márketing en el mundo. Cambiamos nuestra visión: pasamos de 'ofrecer' lo que teníamos a ver lo que el mercado pedía, esto abrió nuestro espectro de posibles consumidores. Así nació, por ejemplo, 'Perú: vive la leyenda'. Además, hay que tener en cuenta que el Perú es un destino complejo, no tan fácil de vender. Por eso, le dimos consistencia técnica a nuestra presencia fuera; en términos técnicos, aplicamos herramientas de dirección de empresas al sector turístico, es decir, una planificación estratégica fundamental.
¿El Perú no lo tiene todo?Sí, pero no basta con tenerlo. A la gente hay que darle conceptos que maneje. Por ejemplo, nuestro aviso sobre Machu Picchu no solo hablaba del lugar sino de su historia. Por eso la frase 'Donde los dioses se convirtieron en montañas'.
AUTOFICHA
- Los piuranos tenemos fama de lentos, pero allí nació gente de muchísimo talento como Miguel Grau, el peruano del milenio. Y, claro, también está Dionisio Romero.
- Me llamo María Magdalena, pero me he ganado el derecho a llamarme Mara… me encanta. Es un nombre que tiene mucha energía y me identifica.
- Las piuranas somos muy directas y muy francas. En Lima me chocó mucho esto pues, si me preguntaban algo, yo decía lo que pensaba. La gente me miraba con susto.
PUBLICIDAD
ULTIMAS NOTICIAS
Imagen
Imagen
Imagen
PUBLICIDAD