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Un dulce de fe: El turrón de doña pepa
Por tercer año consecutivo Fausta lidera sus ventas con el tradicional Turrón de Doña Pepa. Para Mila Huamán el turrón es un símbolo de fe y empoderamiento
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Fausta hierve fruta natural desde muy temprano, por un largo tiempo, para conseguir la miel más exquisita de la ciudad. En su afán por salvar las recetas tradicionales, te ofrece el turrón de doña pepa. Para homenajear a las mujeres que con esfuerzo, constancia y fe triunfan en la vida.
“Cuando a Josefa Marmanillo le dijeron que su parálisis en los brazos le impediría trabajar, no se dejó vencer. Desde su natal Cañete y a sus 45 años viajó a Lima para asistir a la procesión del Señor de los Milagros, ahí entre la multitud, levantó el turrón con mucha devoción y se entregó con fe al Cristo Morado. A su regreso, Doña Pepa ya había sido curada”, cuenta Mila Huamán, fundadora de Fausta.
Esta poderosa fe da la posibilidad de ofrecerte el ‘turrón power’, un dulce aromático con mezcla de sabores y tradiciones. Los ingredientes principales son el ajonjolí, anís, mantequilla, yemas de huevo, hoja de higo y su deliciosa miel frutada a base de chancaca, naranja, piña, membrillo, duraznos, canela y clavo.
“En Fausta lo encontrarás disponible durante todo el año porque la historia y tradición no muere en octubre. Tomamos con mucho respeto la receta de Josefa Marmanillo porque es un símbolo de gran devoción para todos los peruanos y nos inspira a crear este turrón aromático con una mixtura de sabor y tradición inigualable”, agrega la fundadora de Fausta.
La emprendedora señala que: “Fausta nació para engreír al público con productos exclusivos elaborados de forma artesanal para evocar el sabor y cuidado de casa. El secreto radica en las fórmulas que incorporan los mejores insumos”.
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