Hace una semana, el hoy preso Andrés Hurtado solicitó formalmente al mismísimo fiscal de la Nación, Juan Carlos Villena, tener una reunión, pues tenía información relevante que contarle.
Según conoció Perú21, Hurtado envió, a través de su abogado Elio Riera, un oficio pidiendo a Villena que recoja su testimonio sobre sus tratos con altos funcionarios que, por su investidura, solo pueden ser investigados por el titular del Ministerio Público:
Los servidores públicos que cumplen con ese estándar son los congresistas, fiscales y jueces supremos, ministros e incluso la presidenta de la República.
Esta es una inesperada movida por parte de Hurtado, quien hasta hace poco aseguraba que no podía confesarlo todo, pues sus revelaciones lo llevarían a poner en riesgo su vida. “Si hablo, me van a matar”, fue lo que le dijo al fiscal Alcides Chinchay, tal como lo reveló hace una semana este diario.
Si bien el documento fue dirigido a Villena, esta solicitud ya no sería vista por él, sino por su sucesora en el cargo, la entrante Delia Espinoza. Fuentes consultadas por Perú21 indican que el fiscal Villena ya no está firmando documentos ni dando trámite a las notificaciones que se le remiten.
Como se sabe, Espinoza fue elegida por la Junta de Fiscales Supremos como la nueva fiscal de la Nación el último 17 de octubre.
De esta forma, dependerá de la fiscal suprema evaluar si es pertinente escuchar al investigado conductor de TV que hasta la fecha cumple 18 meses de prisión preventiva por los presuntos delitos de tráfico de influencias y actos de corrupción.
Este diario le consultó a Riera sobre la carta que envió a Fiscalía. El abogado leyó los mensajes enviados pero evitó responder
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