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La corrupción arrasa con casi el 20% del presupuesto de cuatro regiones
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La Contraloría General de la República presentó el Megaoperativo de Control al Gobierno Nacional, que proyecta intervenir 283 entidades públicas para supervisar la correcta administración de recursos públicos a nivel nacional. Lo preocupante de la información de la Contraloría es que muestra que solo en 2021, las regiones de Piura, Arequipa, La Libertad y Puno perdieron más de 1,000 millones de soles cada una por corrupción e inconducta funcional.
Por ejemplo, en Arequipa, que es la región que, proporcionalmente a su presupuesto asignado, más dinero perdió por corrupción en 2021, de cada 100 soles que el Gobierno Central asignó a la región, 19.3 soles terminaron en malas manos.
Piura perdió en 2021 más de S/1,210 millones por corrupción. Cifra cuya magnitud se puede comprender mejor si se conoce que en junio de 2022, EsSalud informó que invertiría más de S/1,000 millones en la construcción de seis hospitales. Es decir, en 2021, en Piura se robaron poco más de seis hospitales que pudieron salvar vidas.
Puno, en 2021, registró una pobreza del 42.6%, mientras que casi la mitad de hogares puneños (49.5%) no contaban con acceso a cuatro servicios básicos. Ese mismo año, Puno perdió más de 1,100 millones de soles en corrupción e inconducta funcional. ¿Cuántos hogares puneños hubiesen podido ser implementados con electricidad, agua potable o alcantarillado, con un presupuesto igual al que perdió Puno por corrupción en 2021?
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Mala descentralización
El excontralor general de la República Fuad Khoury le dijo a Perú21 que los altos niveles de corrupción se deben principalmente a la regionalización. “La descentralización es un fracaso gigantesco desde el punto de vista de gestión pública, porque se crearon regiones, presidencias regionales, más burocracia y no se transfirieron las capacidades”, señaló Khoury.
Con respecto a los movimientos regionales, el excontralor cuestionó el financiamiento ilícito de diversas agrupaciones y consideró que ello permite que la corrupción inicie incluso antes de que se ganen las elecciones. “Se crean movimientos regionales financiados por el crimen organizado como el narcotráfico, la minería ilegal, la tala ilegal o empresas corruptas. Estos señores ganan, y después devuelven el favor. La corrupción ocurre en la misma campaña electoral”, dijo.
Khoury consideró que se ha fracasado en la lucha contra la corrupción y aseguró que en el Perú impera la impunidad. El excontralor señaló que “muy pocos van presos”. Además, dijo que “la gente sabe que puede coimear al Poder Judicial y te pone cuatro años con pena suspendida”.
El exfuncionario resaltó que “en los países donde ha sido un éxito la lucha contra la corrupción es porque la sanción es firme, fuerte y rápida”. En ese sentido, dijo que las penas deberían ser más altas para servir como una forma de disuasión.
Falta Voluntad política
Para Khoury, “el corazón del problema de la corrupción está en el Ejecutivo”. En ese sentido, en referencia al presidente de la República, señaló que “el número uno del país tiene que ser el líder de la lucha contra la corrupción”. Asimismo, reiteró que sin voluntad política nada funciona en la administración estatal. Sin embargo, consideró que “nadie en el Ejecutivo hace nada para mejorar los procesos, el control interno ni hacer las cosas correctamente”. Incluso afirmó que los ministerios de Transporte, Salud, Educación y Vivienda “son los más corruptos porque son los que tienen mayor presupuesto”.
La corrupción es un delito nefasto en cualquier sociedad, porque significa que se dejan de construir hospitales que lleven salud, colegios que brindan un futuro, tuberías que abastecen de agua potable y pistas que conectan a millones.
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